Pese al llamado que lanzaron las diferentes cámaras empresariales para ser más flexibles en el cierre de negocios los fines de semana por el alza de casos de covid-19, el gobernador Jaime Roríguez Calderón no cedió ante tal situación y adelantó que dichas restricciones permanecerán al menos este fin de semana en Nuevo León.
En reunión virtual semanal con los alcaldes, el mandatario estatal dio a conocer que, como parte de estos cierres, la movilidad se ha reducido al menos en un 50 por ciento.
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Sin embargo, sostuvo que si los contagios se muestran a la baja, el próximo fin de semana estarían analizando la posibilidad de aperturar los establecimientos.
“Rompiendo el ciclo que rompimos la semana anterior, podríamos entonces tener la apertura de sábado y domingo a partir de la próxima semana, no esta.“¿Qué preferimos? ¿Qué se reúnan este fin de semana o que se puedan reunir en los siguientes? Pues obviamente es mejor Navidad, es mejor Año Nuevo”, dijo.
En este sentido, Rodríguez Calderón anticipó que también podrían estar abriendo carnicerías y fruterías para que los ciudadanos puedan comprar lo indispensable para las fiestas de fin de año.
Ante tal escenario, consideró que ceder a las presiones de los empresarios sería “un error”, y descartó con ello autorizar las peticiones de abrir los fines de semana en horario limitado hasta las 6 de la tarde, tal cual lo pideron para el tema de los restaurantes.
Insistió en que el tema del transporte urbano no genera contagios, y por el contrario, responsabilizó de esto a las fiestas y reuniones.
Por último, criticó que los Oxxos y Super 7 no cumplan con los protocolos sanitarios y anticipó que el secretario de Economía y Trabajo, Roberto Russildi, hablaría con ellos.
Como parte del semáforo covid, en esta semana se volvieron a mantener cuatro indicadores en rojo, cuatro en verde y dos en naranja.
