El director del Instituto Nacional de Antropología e Historia aseguró que la institución que encabeza se encuentra en proceso de transformación desde el 1 de julio de 2018 tras resistir estoico 30 años de una avasalladora contrarreforma neoliberal.
Al encabezar el 85 aniversario del INAH en el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, afirmó que el instituto ahora ya no solo contribuye con la construcción de la identidad nacional sino que documenta y esclarece sus múltiples identidades en el marco de lo que llamó un momento histórico.
"80 años después y luego de tres décadas de una avasalladora contrarreforma neoliberal que el INAH sorteó con estoicismo, el instituto de vuelve a ver inmerso en periodo de transformaciones que arranca con el vuelco electoral del 1 de julio de 2018", dijo frente al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien asistió como invitado especial al evento.
En este sentido, Prieto celebró que en la actual administración se tenga una convivencia democrática que construye un estado de bienestar con la participación de una sociedad inmersa en la vida económica, política y cultural.
Y dijo que en este contexto el INAH cumple con su misión de contribuir con la recuperación de la memoria y la consolidación de la identidad nacional "valores que se vinculan con los anhelos profundos de equidad, diversidad cultural, justicia social y comunalidad".
"Su papel ha sido sustancial para forjar una idea de patria, soberanía y de identidad nacional como sustento de la unidad y la pluralidad de México. Nuestra labor ha reafirmado el interés del gobierno actual de hacer de la preservación de nuestros bienes y valores culturales una política de estado permanente y decidida", agregó.
Explicó que la tarea del INAH puede dimensionarse en los más de 55 mil sitios arqueológicos que se tienen registrados en todo el país, así como en las 63 zonas de monumentos históricos con declaratoria y más de 110 mil monumentos históricos inmuebles catalogados.
Además, da seguimiento a 35 sitios inscritos en la lista representativa del patrimonio mundial de la UNESCO y prepara los expedientes para las nuevas inscripciones.
Además administra 193 zonas arqueológicas, una paleontológica y 162 museos que en conjunto reciben a 30 millones de visitantes por año.