La recuperación del Producto Interno Bruto (PIB) se encuentra detenido y los escenarios actuales eliminan la posibilidad de un rebote en “V” o en “U” ante los efectos de la pandemia y el repunte de casos.
De acuerdo con el análisis “La economía mexicana, en busca de la recuperación”, realizado por Anselmo Salvador Chávez Capó, investigador de la Upaep, los efectos generados por el coronavirus SARS-CoV-2 implicaron “choques” que afectaron a todos de manera generalizada, teniendo repercusiones sobre la actividad económica, la inflación y las condiciones financieras.
Resaltó la importancia de considerar que, en su comparación anual, el PIB tuvo un retroceso real de 8.6 por ciento en el tercer trimestre del año; en actividades terciarias se redujo 8.9 por ciento y el de las Secundarias, 8.8 por ciento; mientras que el de las Primarias se incrementó 7.4 por ciento en igual periodo.
“Se comenzó a observar una recuperación durante el tercer trimestre del año, principalmente, ante la reapertura de diversas actividades productivas. Dicha recuperación ha sido parcial y persiste una elevada incertidumbre sobre el ritmo que tendrá en los próximos trimestres, el cual dependerá, entre otros factores, de la evolución misma de la pandemia ”, explicó el académico.
Para Chávez Capó, la recuperación económica se podría presentar hasta 2021, cuando comience la colocación de vacunas entre la población.
“En octubre se garantizaron acuerdos de precompra con Pfizer y AstraZeneca por hasta 34.4 y 77.4 millones de dosis, las vacunas de estas empresas necesitan un régimen de dos dosis por persona. Asimismo, el gobierno federal, también tiene garantizado el acceso a la dosis de Moderna gracias a un anticipo de 180 millones de dólares. México podrá acceder a las dosis necesarias para inmunizar a 20 por ciento de la población, lo que da la idea de que la recuperación económica podría iniciar a partir del próximo año”, apuntó.
AFM