De las 30 mil hectáreas boscosas del Nevado de Toluca, al menos la mitad necesita intervención por las condiciones que enfrenta el coloso, dio a conocer el secretario de Medio Ambiente de la entidad, Jorge Rescala Pérez.
Durante una visita al Congreso local puntualizó que esta área requiere urgentemente de reforestación, que ya se puede hacer con la nueva denominación.
Antes, no se podía tocar y se dejó plagar muchos macizos forestales y al final terminó sembrándose papa, zanahoria, cebada y otros productos.
Una parte importante del parque, precisó, tiene dueños. A partir de la reforma agraria se repartieron tierras y hoy en día hay ejidatarios que viven en el parque y viven de él, por lo cual no se puede intervenirlos sin su anuencia.
“Anteriormente cuando tenían necesidad de algo estaba prohibido cortar árboles, lo que sucede es que dejaron plagar los árboles, luego ilegalmente los quitaban, por eso hoy en día hay muchos terrenos agrícolas dentro del parque, papa, zanahoria y avena y otras cosas que se dan; hoy rentan, antes rentaban por alguna necesidad económica” añadió.
Con el cambio de denominación a parque se hizo la conversión para que se permitiera hacer algo, no en todos lados. Hay un programa de manejo que dice dónde si cortar y dónde no, nada se ha hace por gusto.
El secretario reconoció que en esta como en otras zonas hay tala ilegal, presencia de grupos organizados que lucran con los bosques, lo cual debe vigilar la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, al gobierno estatal no le corresponde esa función en una zona federal.
Lo que se ha buscado es la asunción de funciones de la federación pero aún no han firmado el convenio, para que el gobierno estatal pueda intervenir de manera directa en el combate de la tala.
Lo cierto, reconoció el secretario de Medio Ambiente, es que se necesita concluir esas gestiones, para asumir esa función, lo cual sería de mucha ayuda para la entidad, porque es donde el Nevado cumple funciones ambientales.
AMG