El crecimiento de 2.1 por ciento en la generación de empleo durante un año en Puebla es una “bomba de tiempo” para la entidad poblana porque no se está respondiendo a la necesidad de más de 60 mil puestos de trabajo formales que se requieren para responder a la demanda de egresados y de la Población Económicamente Activa (PEA).
Así lo explicó Pedro José Jaime González Álvarez, académico del departamento de Economía del Tecnológico de Monterrey en Puebla, quien resaltó que la entidad enfrenta una desaceleración económica por la situación política que se vivió a partir de la incertidumbre electoral y luego la muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso; así como un contexto nacional e internacional complicado.
“De entrada, Puebla vivió un año 2018 complicado y de enero a agosto hubo un gobernador interino (Guillermo Pacheco Pulido). El crecimiento en el empleo es mediocre. Crecer 2.1 por ciento es colocarse a mitad de la tabla cuando otras entidades como Campeche crecieron más de ocho por ciento”, explicó.
Después de que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportó que el estado de Puebla alcanzó al cierre del mes de septiembre la cifra de 633 mil 861 trabajadores con seguro social, lo que representa, un aumento de 13 mil 202 puestos de trabajo, 2.1 por ciento de crecimiento en comparación con el mismo mes de 2018, el especialista calificó como lamentable la situación ya que Puebla requiere multiplicar por seis los puestos generados para responder a las demandas.
González Álvarez comentó que, junto al bajo crecimiento en la generación de empleos formales, se presenta una mayor informalidad laboral, lo que se traduce en incertidumbre para las familias en el corto y mediano plazo.
“El empleo informal en Puebla es de 66 por ciento. Estamos arriba de la media nacional. Hoy en día, la gente trabaja y saca adelante a la familia y vive; sin embargo, para el futuro vendrán los problemas”, apuntó.
La clave para aumentar el empleo formal, de acuerdo con el especialista en economía, es la llegada de inversiones que se traduzcan en empresas que ofrezcan puestos de trabajo con salarios por arriba del promedio y con prestaciones.
“Para crear empleos formales, se tienen que atraer buenas inversiones para que los empleos sean bien pagados. De nada sirve traer empleos con bajos salarios. Para una persona no es atractivo ir a una empresa que le ofrezca el salario mínimo. Me voy a la calle a limpiar parabrisas y gano más dinero y el día de mañana, veo que hago para sacar a mi familia”, resaltó.
Señaló que los empleos formales serán atractivos para la Población Económicamente Activa si ofrecen ingresos para alcanzar la línea del bienestar y, al mismo tiempo, cuentan con seguridad social y la posibilidad de una pensión.
“Sí es importante atraer inversiones que generen empleos donde la persona que está en la informalidad lo prefiera para tener seguro social, antigüedad, lograr pensión y pensar a futuro. Si en la informalidad voy a ganar el triple de lo que gane en una empresa, me iré a la calle. Es importante tomarlo en cuenta porque la bomba de tiempo nos va a explotar”, señaló.
Por último, González Álvarez resaltó la importancia de que las autoridades de los tres niveles de gobierno brinden seguridad y certeza a las empresas para que se puedan instalar y apoyar al crecimiento económico y la generación de empleos.
ARP