La Iglesia católica pide mantener las tradiciones en este marco de la fiesta de la Candelaria y recordar a Jesús como una luz que ilumina hacia la esperanza, evitando distorsionar la celebración, con modas pasajeras.
El responsable de la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Toluca, Jorge Rosas Suárez, detalló que la fiesta de la Candelaria tiene sus orígenes en la presentación de Jesús ante la Iglesia, pues según el relato bíblico de San Lucas, José y María llevaron al Niño Jesús a Jerusalén, para su presentación.
“La ley pedía ofrecer algo al Señor, ellos como eran pobres ofrecieron un par de tórtolas o dos pichones, esto es lo que conmemoramos, la presentación del Señor, de aquí que hay una tradición muy hermosa de que en las casas se tenga una imagen del Niño Jesús”.
A 40 días de que se celebrara la Navidad, refirió, la imagen del Niños Jesús recuerda la sencillez o la humildad de Dios que desde su grandeza se ha hecho pobre, pequeño.
Una de las tradiciones más importantes de la Iglesia Católica es el vestir estas imágenes cada año; sin embargo, en algunos casos se ha distorsionado, con modas pasajeras, dejando de lado el verdadero significado de la fiesta de las candelas.
“Desafortunadamente por cuestiones comerciales, no hay otra razón, se han ofrecido diferentes vestimentas del Niño Dios y muchas de ellas no son el significado real de Jesús como un niño o como un bebé, e incluso de lo que significa Jesús como el salvador del mundo”.
La recomendación, puntualizó, es el vestir estas imágenes como un bebé o niño, de El Sagrado Corazón de Jesús, El Divino Niño, Jesús Médico, Señor de la Misericordia, que representan advocaciones o nombres que de les dan a las manifestaciones del Niño Dios. “Jesús no puede ser comparado con algún otro personaje ni con un ángel, porque él es el salvador del mundo”, concluyó.
MMCF