En menos de 48 horas, en el Área Metropolitana de Guadalajara se registraron una serie de incendios que movilizaron a los cuerpos de emergencia y generaron preocupación por su impacto en las comunidades afectadas.
Desde bodegas industriales hasta viviendas improvisadas, las llamas causaron daños significativos y evidenciaron la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad y prevención. Entre estos siniestros, se incluyen casos que han involucrado el rescate de animales, afectaciones a instalaciones clave y cuestionamientos sobre el manejo de riesgos en la región.
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El primero de estos incidentes ocurrió en un almacén de muebles usados en la colonia El Órgano, en San Pedro Tlaquepaque. El fuego consumió colchones, ropa y un vehículo, mientras amenazaba con propagarse a una casa antigua cercana. En medio de las llamas, dos perros, “Toby” y “El Güero”, quedaron atrapados en el lugar. Los bomberos municipales lograron rescatarlos ilesos, aunque con signos de posible intoxicación por humo.
De acuerdo con el propietario del inmueble, el uso irresponsable de pirotecnia durante las fiestas podría haber sido la causa del incendio, aunque esto deberá confirmarse mediante los peritajes correspondientes.
En Tonalá, un incendio devastó una bodega de plásticos de 50 por 50 metros, consumiendo materiales inflamables y un vehículo. El siniestro obligó a la evacuación preventiva de 20 personas y generó una columna de humo visible desde varios puntos de la ciudad. Para controlar las llamas, los bomberos emplearon más de 200 mil litros de agua y realizaron al menos 11 boquetes en las paredes del inmueble. Aunque no se reportaron víctimas, las autoridades continúan investigando las causas exactas del incendio.
Otro incendio afectó una maderería en Zapopan, ubicada en la carretera La Venta-Nextipac. El fuego, que se originó en un horno de procesamiento de madera, se propagó rápidamente en un área de 10 por 15 metros. La intervención oportuna de los bomberos evitó que las llamas alcanzaran propiedades vecinas. Las investigaciones preliminares sugieren que una falla operativa o eléctrica pudo haber provocado el incidente, pero las causas definitivas están aún por confirmarse.
Un cuarto incidente tuvo lugar en la colonia El Mante, también en Zapopan, donde una vivienda improvisada ubicada junto a la iglesia San José del Mante se incendió. Las llamas alcanzaron menaje almacenado en un cuarto del templo, lo que obligó a evacuar a los asistentes como medida preventiva. Aunque el siniestro fue controlado rápidamente y no hubo víctimas, este caso puso en evidencia los riesgos asociados con viviendas improvisadas en zonas urbanas densamente pobladas.
A esta serie de incendios se suma uno más ocurrido en la colonia Los Manguitos, en Tonalá, donde un terreno en llamas movilizó a elementos de Protección Civil y Bomberos de Jalisco, así como a brigadistas locales. Durante este incidente, dos perros atrapados fueron rescatados por los bomberos, quienes lograron ponerlos a salvo mientras continuaban combatiendo el fuego. Este caso, aunque no dejó daños humanos, resalta el impacto de los incendios en comunidades vulnerables y en la fauna local.
Mientras las investigaciones avanzan para determinar las causas exactas de cada uno de estos siniestros, las autoridades locales refuerzan las inspecciones para mejorar la infraestructura y promover una cultura de prevención que permita mitigar riesgos en el futuro. Por su parte, los ciudadanos deben mantenerse alertas y colaborar en la identificación de posibles fuentes de peligro, para contribuir a la seguridad colectiva.
Convenio para manejo de fuego
El gobierno de Jalisco firmó un convenio con la Conafor para fortalecer el manejo del fuego en el estado mediante la creación de estructuras como el Comité Estatal de Manejo del Fuego y el Mando Unificado, con acciones enfocadas en la prevención, capacitación y respuesta eficaz ante incendios forestales.
MC
