Asociación civil propondrá al nuevo Congreso Local la eliminación de las cuotas escolares en la zona sur del estado, ya que estas no se han visto reflejadas en los planteles y por las condiciones actuales de crisis por la pandemia los padres de familia no están en condiciones de hacer las aportaciones que a veces llegan a los mil pesos.
Fredy Torres Mar, presidente de la Asociación Gestores Productivos Comunitarios, refirió que las escuelas deben de dejar de verse como un negocio, ya que muchas veces inclusive la sociedad de padres de familia maneja el recurso como les ordenan los directores cuando debe ser algo autónomo, mientras que las instalaciones están en pésimas condiciones.
Dijo que con esta propuesta hacía los legisladores, se podrán dar cuenta si realmente están a favor del pueblo, ya que esta ha sido la principal queja por condicionamiento de los documentos a los alumnos en este fin de cursos en Altamira.
"Vamos a promover esta iniciativa con los nuevos congresistas locales de Morena en Tamaulipas, veremos si ellos están o no con el pueblo, acabemos con las lacras que condicionan y niegan el derecho a la educación gratuita. Ya basta, la escuela no es un negocio, ya lucraron con ella mucho tiempo, se la acabaron, se olvidaron de la calidad educativa, se concentraron en hacer riquezas".
Afirmó que solo el pueblo los puede frenar, pero para eso tienen que despertar las masas populares. Dijo que los padres de familia de las asociaciones en las escuelas deben de actuar con dignidad, pero sobre todo honestidad para el buen manejo de los recursos, de lo contrario que desaparezcan.
"Esto implica ya no sentirse importantes nomás porque el director de la institución los pone a cuidar la puerta de la entrada, o porque les dice que ellas son las encargadas, solo los usan, los compran con migajas, con limosnas, los hacen sentir importantes, se aprovechan los directores de la nobleza de muchos padres de familia".
Agregó que se necesita una sociedad revolucionaria, participativa sí, pero que sepa defender la legalidad y la justicia. Simplemente una nueva generación de gente, solidaria, consciente y con mucha dignidad para no dejarse usar más por los malos elementos de la educación.
"Necesitamos de nuevos profesionistas de la educación, que tengan valores y principios, que no les ganen la ambición de los billetes, que no vean a la escuela como un negocio, sino como un centro de formación de una nueva generación de patriotas", enfatizó.