Aunque ya se envió la primera ayuda a los damnificados del huracán Otis, en Acapulco, el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, anunció este domingo que se solicitó a todas las comunidades parroquiales de la Arquidiócesis una colecta especial de las misas dominicales para apoyar a la población de este centro turístico de Guerrero.

En su tradicional mensaje dominical transmitido a través de las redes sociales, el también presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano señaló que se busca, por medio del Arzobispado de Acapulco, enviar un poco de ayuda económica para los afectados.
"Se ha pedido a todas las comunidades parroquiales de nuestra arquidiócesis una colecta especial de las misas dominicales con la finalidad de que por medio del Arzobispado de Acapulco se envíe un poco de ayuda económica que puede ser tolerable este momento.
"Desde hace unos días que somos testigos de la devastación ocasionada en Acapulco por el huracán Otis, debemos de fortalecer en cada uno de nosotros el sentido de este mandamiento y disponernos a extender nuestras manos, proporcionando la ayuda que se necesita", dijo el arzobispo.
Cabrera López manifestó en sus redes sociales que en la Iglesia se apoyan de Cáritas, un organismo nacional, internacional y local que hace llegar la ayuda a quienes en verdad lo necesitan, como en este caso de Acapulco, que salió afectado por el paso del huracán Otis por la ciudad.
"Les invito a que compartamos generosamente por los que hoy sufren el desabasto de lo más básico. Cáritas de Monterrey ya ha enviado sus primeras ayudas a Acapulco, somos conscientes de la situación de desesperación que vive los habitantes de este destino turístico.
"Pero de ninguna manera secundamos las acciones de rapiña y violencia por parte de algunas personas que están realizando aprovechando la situación", indicó el arzobispo de Monterrey.