El dirigente del Sindicato de Trabajadores Petroleros, Carlos Romero Deschamps, desmintió los rumores de su renuncia y afirmó que aunque lo "enferman, matan y entierran" él continúa al frente de los petroleros.[OBJECT]
"Me enferman, me matan, me entierran y aquí estoy, trabajando, aquí en el Senado y en el sindicato, en eso no hay ningún problema", dijo el también legislador.
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Además, aseguró que aunque la ordeña de combustible afecta a Pemex, las pérdidas que provoca no ponen en riesgo la viabilidad de la empresa, aunque consideró que se deben elevar las penas a quienes cometan este delito.
Romero Deschamps consideró que detrás de las ordeñas de combustible está el crimen organizado, "lo que pasa es que es gente que actúa cuando uno no lo ve, se esconden", dijo en entrevista.
Señaló que es una problemática que ha crecido y afirmó que aunque la ley fue modificada para perseguir este delito, "tampoco estaríamos en contra de que endurecieran las penas, por supuesto que sí".
ALEC
