El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que no cometió muchos errores durante su administración, ya que recordó, que desde su época como candidato presidencial, sus equivocaciones se maximizaban.
“Tengo que agradecer al creador y a la suerte que no cometí muchos errores, porque los errores nuestros se magnificaban con todo, ayer sobre las inundaciones en Acapulco que se están atendiendo, ahí están las fuerzas armadas, pero todos los de las redes, puro opositor y siempre con la leyenda: “disfruta lo votado” como diciendo “ahí está, toma”, así de ese tipo, bueno, 200 veces llenando el zócalo y la preocupación, el día que no se llene el zócalo, ese día nos van a hacer pedazos”.
En su conferencia de prensa matutina, el mandatario expuso que una de las cosas que le llena de orgullo es que en su administración “no se reprimió, no se masacró a nadie, no hubieron masacres, no hubo censura, no se apercibió a nadie”.
“Entonces ¿cuál dictadura?, ¿de dónde?, hay libertad completa, absoluta, porque les ganamos el debate y les ganamos democráticamente las elecciones porque el pueblo es mucha pieza”.
Al reflexionar sobre si hubiera sido mejor llegar al poder en 2006, cuando perdió ante Felipe Calderón, El Presidente expresó que hubiera evitado “guerras y privatizaciones”, aunque, refirió, que la edad en la que llegó a la silla presidencial fue la justa para no tener “tentaciones” de mandar y con el dinero.
“Yo me he hecho esa pregunta si nos hubieran respetado triunfo en 2006, de las cosas buenas es que se hubiesen invitado muchas guerras, nosotros no íbamos a declarar la guerra al narcotráfico, íbamos a hacer lo mismo, atender las causas y no íbamos a someternos a recomendaciones del extranjero y además como íbamos a gobernar con legitimidad, después de ganar en elecciones, no íbamos a tener necesidad de actuar de manera espectacular y de hacer eso de pegarle un garrotazo a lo tonto al avispero, no teníamos por qué recurrir a eso (…) También hubiésemos impedido las privatizaciones que se hicieron a partir de entonces, se intensificaron con Salinas, siguieron con Zedillo, pero con Calderón siguieron los contratos, robo, saqueo, en ese sexenio es cuando se recibieron más ingresos por venta de petróleo al extranjero porque el precio del barril estuvo en 100 dólares y los excedentes se derrochaban”.
“Ya cuando llegamos teníamos más y más experiencia, otra cosa buena, fui el presidente de más edad, ya no creo que esto vuelva a ocurrir en toda la historia, entonces también eso ayuda, la edad, la experiencia ayuda entre otras cosas, porque cuando termina un presidente joven, siempre queda el ansia de seguir mandando, de seguir tentando el poder y con la edad se reafirma no tenerle tanto apego al dinero y al poder”.
LG