Los cuatro militares que presuntamente participaron en la muerte de cinco jóvenes en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y que ahora están presos bajo cargos de desobediencia, permanecerán en prisión al menos un año.
Fuentes consultadas por MILENIO revelaron que los imputados recibieron prisión preventiva justificada por un año, además, el juez que lleva la causa decretó dos meses para el cierre de la investigación complementaria.
Los cuatro cabos de caballería que fungían como artilleros fueron vinculados a proceso por el delito de desobediencia, a la par de la investigación que encabeza la Fiscalía General de Justicia Militar, la Fiscalía General de la República lleva otra para establecer si existe responsabilidad penal en el fuero civil por la muerte de las cinco personas.
El viernes, los militares acusados fueron ingresados a la prisión militar ubicada en el interior del campo militar número 1-A, en Naucalpan, Estado de México.
El caso donde perdieron la vida las víctimas ocurrió el 26 de febrero, en la colonia Manuel Cavazos Lerma, en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
De acuerdo con fuentes consultadas, los militares habrían disparado en contra de la camioneta donde iban los jóvenes sin recibir la orden de su superior de abrir fuego.
Las autoridades señalaron que las víctimas salieron positivas a las pruebas de radizonato de sodio, lo que confirma que tuvieron contacto con armas de fuego.
Trascendió que las víctimas eran integrantes de una célula del Cártel del Noroeste.
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