El reciente asesinato de los músicos colombianos 'B-King' y 'Regio Clown', ocurrido en el Estado de México, continúa bajo el escrutinio público no solo del país, sino también de Colombia y parte de Latinoamérica.
Los hechos, ocurridos a mediados de septiembre de 2025, también han vuelto a poner sobre la mesa la creciente vulnerabilidad que se ha registrado durante las últimas décadas contra aquellos que se dedican a la música en México.

En la última semana, MILENIO ha recordado algunos de los casos más conocidos de cantantes cuya vida se apagó a causa de la inseguridad de México y, en la mayoría de ellos, a manos del crimen organizado.
México también ha sido escenario de crímenes mortales contra de más de un miembro de una agrupación musical, como ocurrió con Grupo Fugitivo, en Tamaulipas, en mayo pasado, y Kombo Kolombia, en Nuevo León, hace 12 años.

El caso de Mente en Blanco
Aunque la mayoría de los casos de músicos privados de la libertad y asesinados han estado vinculados a la escena del regional mexicano, el 1 de junio de 2012 las y los mexicanos fueron testigos del homicidio de cuatro integrantes de un grupo musical dedicado al rap y hip-hop.
Los hechos ocurrieron en la colonia Hacienda Los Morales, en Monterrey, Nuevo León, cuando cuatro integrantes de Mente en Blanco fueron interceptados por un comando armado mientras se encontraban a bordo de un vehículo.
Las víctimas fueron identificadas como Adán Zapata (21 años), Iván de Jesús Serna González (25 años) y los hermanos Diego Salvatore y Héctor Daniel Almaraz Huerta (20 y 19 años); estos últimos hijos de José Santos Almaraz, ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del municipio de Guadalupe.

La investigación del crimen dio como resultado la detención del presunto autor material una semana después de los hechos.
Se trató de Leo Ismael Ordaz Sauceda, alias 'El Flaco', sicario del Cártel del Golfo (CDG), quien indicó haber atacado a los jóvenes por su presunta participación en un grupo criminal contrario, Los Zetas.
No obstante, familiares y personas cercanas a los integrantes de Mente en Blanco señalaron que la agresión armada posiblemente fue un error, toda vez que los jóvenes fueron descritos como personas sanas y alejadas de cualquier tipo de problema.

Kombo Kolombia: el trágico asesinato de 17 personas
El 25 de enero del 2013, Nuevo León volvió a ser escenario de un atroz crimen. La madrugada de aquel viernes, 18 integrantes —entre músicos y staff— de la agrupación musical Kombo Kolombia, especializada en vallenato y cumbia, fueron privados de la libertad por un comando armado.
Acorde con el reporte oficial, 12 músicos y cinco colaboradores del conjunto musical salieron de sus hogares la noche del jueves 24 de enero del 2013 para dar una presentación privada en un bar del municipio Hidalgo.
Aunque la locación se cambió de último momento, los músicos cumplieron con su trabajo e hicieron acto de presencia. Horas después, cuando sus familiares trataron de localizarlos, fue imposible.
En el lugar donde Kombo Kolombia dio su última presentación fueron localizado vehículos abandonados, parte de los instrumentos musicales y manchas hemáticas. Tres días más tarde, las autoridades de Nuevo León confirmaron la localización de los cadáveres.

Según se informó, mientras los músicos realizaban su presentación, múltiples hombres armados arribaron al lugar y los privaron de la libertad. Un único sobreviviente del grupo de 18 personas reveló a las autoridades que, antes de que dispararan a sus compañeros en la cabeza, los sicarios preguntaron si trabajaban para algún cártel de drogas.
Tras el asesinato, los cuerpos fueron arrojados a un pozo de agua de aproximadamente 15 metros de profundidad en el municipio La Mina.
Al respecto del móvil del crimen, la detención de José Isidro Cruz Villareal, alias 'El Pichilo', ocurrida en marzo de 2014, apuntó que el ataque fue realizado por Los Zetas en aparente venganza, a raíz de que Kombo Kolombia había aceptado presentaciones en lugares asociados a sus enemigos, el Cártel del Golfo.

El caso de Grupo Fugitivo
Poco más de 12 años después del caso de Kombo Kolombia, el norte del país volvió a ser testigo de un crimen similar: la desaparición y el asesinato de cinco integrantes de Grupo Fugitivo, banda de música regional mexicana originaria de Reynosa, Tamaulipas.
La agrupación estaba conformada por jóvenes, principalmente: Francisco Xavier Vázquez Osorio (20 años), Nemesio Antonio Durán Rodríguez (40 años), Livan Edyberto Solís de la Rosa (27 años), Víctor Manuel Garza Cervantes (21 años) y José Francisco Morales Martínez (23 años).
Los hechos ocurrieron alrededor de las 22:00 horas del domingo 25 de mayo de 2025, cuando los integrantes se dirigían a un evento privado en la colonia Riberas de Rancho Grande, Reynosa y fueron privados de su libertad.

De igual manera, al no tener contacto con ellos, sus familiares solicitaron apoyo de las autoridades y se emitieron las fichas de búsqueda correspondientes.
Cuatro días más tarde, el 29 de mayo de 2025, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Tamaulipas confirmó el hallazgo sin vida de los cinco integrantes de Grupo Fugitivo, así como la detención de nueve personas presuntamente relacionas con el caso.
Según se informó los sospechosos formaban parte de la facción Los Metros, del Cártel del Golfo.
RMV.