La mañana de este sábado, se registró un enfrentamiento entre elementos de la Fuerza Civil e integrantes de un grupo delictivo en el municipio de Santiago Sochiapan, Veracruz.
El saldo fue de cinco civiles abatidos, entre ellos, Said Viveros, presunto líder de una célula delictiva con operaciones entre los límites de Veracruz y Oaxaca.
Los hechos se registraron en la comunidad de Benito Juárez, cuando los elementos adscritos a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) recibieron un reporte sobre la presencia de civiles armados en dicha comunidad.
Al trasladarse al lugar, fueron agredidos por los civiles quienes disparaban con armas de grueso calibre; ante ello, los uniformados repelieron la agresión y comenzó el fuego cruzado, que terminó con la muerte de cinco civiles, entre ellos Said Viveros, alias El Cuate, que minutos después fue identificado como jefe de plaza.
Los cuerpos quedaron bajo resguardo de las autoridades, quienes además aseguraron armas de grueso calibre y cartuchos para las mismas, además de chalecos tácticos.
El Cuate era buscado por las autoridades de Oaxaca y Veracruz pues se le ubica como un peligroso generador de violencia y jefe de una célula criminal dedicada al secuestro, extorsión, distribución de drogas al menudeo, así como al cobro de piso a empresas constructoras y ganaderos.
Datos de inteligencia, así como de las mesas de la construcción de la paz de ambos estados, establecen que numerosos reportes sobre sus actividades ilegales, desde el robo de ganado hasta el despojo de ranchos los cuales empleaba como escondite en la frontera de Veracruz y Oaxaca.
Se presume que El cuate, contaba con la protección de autoridades municipales, de aquella región principal, de ahí el motivo por el cual, fuera difícil su detención y ubicación de parte de las autoridades estatales. Incluso reportaron que, este sábado los policías tras el enfrentamiento, algunos funcionarios municipales y civiles, intentaron retener a los uniformados, presuntamente defendiendo a los delincuentes abatidos.
Pobladores reportaron a medios locales, que El Cuate Viveros se había convertido en guardaespaldas de la presidenta municipal María López, emanada del Partido Acción Nacional (PAN).
En aquel municipio se mantiene un fuerte operativo por aire y tierra, para mantener el control entre la población, y detener al resto de los presuntos integrantes de la célula delictiva que comandaba Said Viveros.
