Ante la reapertura de bares en Nuevo León tras el descenso de casos de covid-19, la Dirección de Inspección y Vigilancia del municipio de Monterrey clausuró temporalmente ocho bares por la venta de alcohol sin permiso.
Durante la noche del miércoles, inspectores municipales realizaron visitas en bares y cantinas para verificar que se siguieran las medidas de seguridad sanitaria y que se respetara el aforo del 20 por ciento.
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Los negocios clausurados fueron el “Royal”, “Líbido”, “Bar Peters”, “Topaz de Lux”, “Pasarelas”, “Manassas” y “La Celda”.
Los siete bares antes mencionados no contaban con su respectiva licencia estatal que les permite la venta y consumo de bebidas alcohólicas.
Mientras que otro más, del que no se proporcionó el nombre, no estaba siguiendo las medidas sanitarias para evitar contagios de covid-19.
