Sin mediar palabras y de manera agresiva un grupo de 50 personas ingresó al Restaurante Arroyo, ubicado en Insurgentes Sur, en la alcaldía Tlalpan, para desalojar a los trabajadores. José Víctor Arroyo Loyo, hijo del dueño y quien fue expulsado de la administración del lugar, pretende retomar a la fuerza su posición.
Un juez determinó que la administración anterior debe recuperar el negocio mientras que los actuales dueños no podrán ingresar al recinto. Trabajadores cerraron la vialidad por varios minutos para exigir claridad sobre su situación laboral.

“Queremos que se cumpla el mandato. No fue violento porque a nadie se le golpeó. Pero nos encontramos con la negativa. Revisando los papeles y con los abogados, se dieron cuenta que no había opción. Esto es una cuestión que se continuará legalmente…los anteriores administradores era un grupo orquestado por una persona que vive con mi papá, su concubina, que empezó a gestar el tema hasta que se unió una hermana e hicieron este grupo donde se apoderaron del tema. Se apoderaron absolutamente del tema y por eso fui a ver las instancias necesarias para plantear el tema y revertirlo porque no era legal”, declaró José Arroyo, hijo del dueño.
Los trabajadores sin opción y al ver tomadas las instalaciones de su lugar de trabajo decidieron tomar la avenida de los Insurgentes por un lapso de 15 minutos, pues reclamaban que miembros del grupo de choque incluso los depojaron de sus pertenencias.
“Ni me percaté ni creo que haya sucedido una cuestión así, porque no había una razón de eso. Si había caras angustiadas de algunos empleados es porque algo deben o hicieron algo fuera de ley. Lo que sigue para el restaurante es seguir adelante corregido y aumentando”, abundó.
En el lugar se encuentran elementos de la Secretaria de Seguridad Ciudadana y de la Guardia Nacional.

José Arroyo afirmó que los actuales dueños del restaurante se negaba a retirarse del recinto. Reiteró que es administración estaba llevando al negocio "al despeñadero". Al momento, el restaurante está cerrado para el regreso de la pasada administración, que retomará funciones durante la tarde, y el bloqueo sobre avenida Insurgentes ya fue retirado.
Restaurante Arroyo acusa a José Arroyo de allanar el establecimiento ilegalmente
En su página de Facebook, el Restaurante Arroyo publicó un par de videos acusando al José Arroyo de allanar el establecimiento “aún poniendo a su padre en peligro después de haberlo defraudado”.
En uno de los videos grabado desde adentro del lugar, se observa que mientras el restaurante se encontraba fuera de servicio, un grupo de personas se colocó en la reja principal para después empujarla con fuerza hasta lograr derribarla, aun cuando había elementos de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) resguardando el establecimiento.

Un segundo video en las oficinas del restaurante, detalla que el dueño del lugar, una persona de la tercera edad, es acomodado con ayuda de un enfermero y un agente de seguridad en silla de ruedas para abandonar las instalaciones. La mujer que graba el video refiere que antes de alcanzarlos en su casa (del dueño) llevará consigo las computadoras del restaurante.
Momento más tarde, empleados del restaurante de comida mexicana, bloquearon por varios minutos la Avenida Insurgentes debido a la incertidumbre por saber lo que pasaría con su trabajo.
MILENIO se dio a la tarea de entrevistar a José Arroyo, que de acuerdo con otros medios, la familia acusa por irrumpir ilegalmente luego de que su padre lo destituyera del cargo como administrador. El hijo Arroyo asegura ser el administrador legal desde hace 35 años y que es la administración actual la que a través de “engaños” fue acomodándose en el restaurante.
dmr