En conferencia de prensa por el atentado a dos funcionarios de la Ciudad de México, informaron que las víctimas, Ximena Guzmán y José Muñoz, no habían recibido amenazas previo al ataque.
"No teníamos identificadas amenazas previas a la víctimas", informó la fiscal de la Ciudad de México tras ser cuestionada si desde antes los funcionarios estaban en riesgo.
Los estaban vigilando
En el evento que presidió la titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, Bertha Alcalde, junto con Pablo Vázquez, secretario de Seguridad Ciudadana, revelaron que durante la investigación encontraron que ambas víctimas estaba siendo vigiladas.
"El evento efectivamente fue planeado e incluso en días previos se identificó la vigilancia de una personas a las víctimas e inmediaciones del ataque", dijo.
El secretario de seguridad detalló que las cámaras de vigilancia del lugar del asesinato habían captado a un hombre que estuvo por varios días presuntamente haciendo labores de vigilancia.
Funcionarios no tenían seguridad
Ambos funcionarios no contaban con un dispositivo de seguridad, pese a la cercanía que tenían con la jefa de gobierno de la CdMx, Clara Brugada.
"Son personas que tenían un trabajo muy cercano a la gente, de mucha proximidad, de mucho diálogo con las personas, y realizaban sus labores sin mayor temor, sin mayor miedo, las realizaban de manera habitual", expresó el funcionario.
La fiscal declaró que todavía no hay una línea de investigación clara sobre el hecho, por lo que piden no especular si es que el asesinato tiene relación con el crimen organizado.
En cuanto al paraderos del responsable, las autoridades siguen investigando su posible ubicación, hasta ahora solo han identificado vehículos que utilizaron para escapar hacia el oriente del Estado de México.
PNMO
