El miércoles 10 de septiembre, en plena emergencia tras la explosión de una pipa con casi 50 mil litros de gas en el puente de la Concordia; Alonso salvó la vida de Azulet, una bebé de dos años, quién durante el siniestro su abuela, la señora Alicia protegió hasta el último día de su vida.
Un acto de amor le cambió la vida. Se trata de Alonso Segura, de 47 años de edad, comerciante y motociclista. Es originario de Iztapalapa, una de las alcaldías más pobladas de la Ciudad de México.

¿Qué hizo Alonso durante la tragedia?
Esa tarde, Alonso tomó su moto y fue a ayudar a las víctimas de la explosión. El hombre se encontró con la abuela y su nieta —a ésta última ya la traía en brazos un elemento de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC)— por lo que el comerciante sin dudarlo la llevó a la clínica 53 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en los Reyes la Paz, Estado de México, a 500 metros de la emergencia.
En entrevista para MILENIO, el hombre narró cómo fue el momento y los obstáculos que atravesó hasta llegar al nosocomio:
"Vimos a la señora Alicia que iba caminando, callados, no decían nada, la niña no platicaba, no gritaba, estaban en shock completamente".
Entre lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta, recordó la imagen de ambas mujeres: "Empezamos a quitarle su ropa a la bebé porque estaba quemada: el pantalón, los zapatos…; pero ya estaban totalmente pegados a la piel", recordó.
Así fue la explosión de la pipa de gas
Así recuerda la tragedia del 10 de septiembre
Para el motociclista no fue fácil. El padre de familia recordó a la abuela de la bebé como:
"Es una heroína, creo que ella es la que se lleva el papel, el amor de todos, porque no puede haber más un amor más puro que el de la señora, es dar la vida por otra persona, que descanse en paz".
La vida no se detiene
Han pasado ocho días desde la tragedia que cambió la vida de varias personas. Alonso continúa su trabajo de comerciante entre las calles República de Uruguay y Correo Mayor en la alcaldía Cuauhtémoc.
Desde ahí, recordó a esa pequeña guerrera, quien ahora recibe atención médica de alta especialidad en Texas, Estados Unidos. También asegura que cada que esté en sus manos, seguirá ayudando a quienes lo necesite.
"Le digo a esta pequeña que siga luchando por su vida, que un familiar dio la vida por ella, que aproveche todo". Finalizó.
Víctimas de la explosión de la pipa de gas
Al último corte, las autoridades han reportado el fallecimiento de 20 personas y 30 permanecen hospitalizadas.
La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, informó que, tras el peritaje, resultó que la pipa venía de Tuxpan, Veracruz y se dirigía a una gasera en Tláhuac.
También estableció que la pipa iba a exceso de velocidad, de acuerdo al carril por el que circulaba.
RM