Un agente de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California fue atacado a balazos, la mañana del jueves 27 de noviembre, al salir de su vivienda en la colonia Buenos Aires Sur, Tijuana.
El ataque ocurrió entre las calles Sarahuita e Isla Santa Catarina, donde al menos un presunto agresor abrió fuego contra el agente.
¿Cómo sucedieron los hechos?
El uniformado de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) repelió la agresión y resultó ileso, lo que obligó a los atacantes a huir del lugar.
Sin embargo, un civil armado descendió de un vehículo y abrió fuego contra el funcionario público, quien respondió de inmediato con su arma de cargo, iniciando una breve persecución a pie por las calles aledañas.
Minutos después, autoridades localizaron una camioneta Ford Expedition con placas de California, presuntamente utilizada en el atentado.
La unidad fue localizada por elementos de la Secretaría de Seguridad Estatal y el Ayuntamiento de Tijuana, gracias a la red de bio-vigilancia urbana, que capturó imágenes clave de la ruta de escape.
Personal de la FGE acordonó el área y quedó a cargo del procesamiento y la investigación del ataque.
Agresiones a elementos de Seguridad Publica en Baja California
Este no es un caso aislado en la violencia que azota a Baja California, particularmente en Tijuana, epicentro de disputas entre cárteles por el control de rutas de tráfico de drogas y extorsiones.
En los últimos 12 meses, al menos una docena de ataques similares han cobrado la vida de policías municipales, estatales e investigadores ministeriales, según datos preliminares de la FGE.
Las operaciones de la FGE abarcan desde narcotráfico hasta secuestros y extorsiones, lo que genera represalias de "diferentes grupos criminales".
Un ejemplo ocurrió hace un mes y medio, cuando un agente ministerial fue asesinado horas después de liderar la captura de un líder en secuestros, lo que culminó en la ejecución de los detenidos en custodia.
La escalada de violencia contra servidores públicos ha encendido alarmas en el gobierno estatal. El gobernador de Baja California, Marina del Pilar Ávila, emitió un comunicado condenando el ataque y prometiendo "toda la protección posible" a los fiscales y policías.
Organizaciones como México Unido Contra la Delincuencia han exigido, en redes sociales, un refuerzo inmediato en los protocolos de seguridad para investigadores de alto riesgo, recordando que Tijuana registró más de 800 homicidios en 2024, muchos relacionados con el narco.
HCG