LA BUENA: Está claro que la pausa por la pandemia del covid-19 ha afectado a toda la industria del futbol; sin embargo, para Renato Ibarra esta situación le cayó como anillo al dedo. Recapitulemos… el pasado 12 de marzo al futbolista se le otorgó la suspensión condicional de proceso por el delito imputado de violencia domestica; aunque, para obtener este beneficio legal (que le permitía salir de la prisión preventiva oficiosa) está obligado a cumplir con una serie de medidas cautelares, entre las que figura la de firmar cada mes, durante los próximos seis, con la restricción de que no puede salir del país.
Esto venía a perjudicar de sobremanera la carrera futbolística de Renato, quien, al ser apartado del América, tenía que buscar un nuevo equipo para la próxima temporada, pero con la necesidad de que fuera de la Liga Mx, ya que por las fechas en las que cerraba el mercado internacional (1 de septiembre) no le iba a dar tiempo para registrarse en el futbol extranjero, toda vez que su medida cautelar vence a mediados de septiembre.
Sin embargo, la pausa por la pandemia modificará todos los calendarios de traspasos –algo que ya avaló la FIFA– y es muy seguro que para mediados de septiembre algunas Ligas apenas estén terminando o el mercado de fichajes apenas esté en su primer mes (el de verano dura dos); recordemos que el futbol se ha retrasado ya dos meses y aunque se aprieten las competiciones, ya hay un desfase que para Renato ha sido providencial.
LA MALA: Pues parece que Renato Ibarra sí tendrá que ir buscando acomodo en el extranjero, pues en la Liga Mx, en la cual desea permanecer, parece que ya no tiene cabida. Pese al esfuerzo de su representante, que ha tratado de colocar a su jugador o generar interés a través del ruido mediático, lo cierto es que al menos dos equipos ya lo descartaron por completo.
A principios de abril fue Toluca el que dijo que no tenía interés y hoy se le sumó Cruz Azul que –a través de su gente de comunicación– mandó el mensaje de que no existe interés en el futbolista.
La otra opción que se ha manejado es la Pachuca, toda vez que Renato pudo entrenar algunos días en ese club con su hermano Romario, pero no ha habido algún posicionamiento oficial de los Tuzos.
En fin, unas por otras, quizá a Ibarra le queden los días contados en la Liga Mx, pero tendrá la posibilidad de buscar equipo en otras latitudes.
