El British Open o The Open Championship, como ustedes prefieran llamarlo, es el evento golfístico más antiguo del mundo golfístico. Es conducido por la R&A (Royal and Ancient Golf Club of St Andrews, como se le conoce por sus siglas en inglés), y además de que forma parte de los cuatro majors del golf y se jugó por primera ocasión en 1860.
La historia cuenta de un jugador llamado Allan Robertson y era considerado el mejor del mundo, dominando el golf a mediados del siglo XIX hasta su muerte en 1859. De ahí que se buscara a su sucesor, y de ahí es como surge el Open Championship al año siguiente.
La primera edición se jugó en Prestwick Golf Club y contó con la participación de únicamente ocho profesionales que jugaron tres rondas de 12 hoyos, resultando como ganador Willie Park Sr., venciendo al gran favorito Tom Morris Sr. por dos golpes de diferencia. Al año siguiente, el torneo se abrió también para amateurs, donde participaron 18 golfistas y otorgando el premio que originalmente era un cinturón de cuero rojo con una hebilla de oro. El Open solo se ha suspendido en tres ocasiones, una a causa de la Primera Guerra Mundial, después por la Segunda Guerra Mundial y más recientemente a causa de la pandemia por Covid-19.
Así es como este evento se juega hasta la fecha, con una rotación de nueve campos, (Prestwick ya no), siendo el más famoso de estos el Old Course en St Andrews en Escocia, la llamada cuna del golf y es el campo en el que en más ocasiones se ha jugado el evento.
Este año se disputa la edición número 153 y el anfitrión será el Royal Portrush Golf Club, en Irlanda del Norte, el cual fue la sede del Open por primera ocasión en 1951. El campeón defensor es Xander Schauffele, de un 2024 que se celebró en Royal Troon. Mi favorito es Rory McIlroy. quien prácticamente juega de local, ya que nació a 20 minutos de Royal Portrush y parece haber dejado atrás los monstruos de por fin haber ganado en Augusta y llevarse el Grand Slam del golf. Viene de quedar segundo el Genesis Scottish Open y aunque perdió al final, se le vio completamente en otra actitud. Nada es mejor que ganar en casa, y creo que Rory se lo merece.