Política

Amparo Mexicano

La preocupación por el fenómeno de la violencia mortal en nuestro país ocupa quizás la número uno durante ya casi 20 años. Esto obedece al incremento de la actividad del narcotráfico en México, a inicios de los años 2000, con el desmantelamiento de los cárteles de Colombia, que trasladó prácticamente sus operaciones de narcotráfico a México.

Para atender esta preocupación, las estrategias de los Gobiernos en turno han sido variadas en tono, concepto, respuesta, e intensidad.

Desde 2006 Felipe Calderón instauró una estrategia militarizada. Lanzó una guerra abierta contra el narcotráfico, utilizando las Fuerzas Armadas para combatir a los cárteles. Esta política incluyó el despliegue de soldados en diversas regiones del país para combatir al crimen organizado. Durante su administración, hubo un enfoque en la captura de líderes de cárteles, lo que, aunque resultó en la detención de figuras clave (como Joaquín "El Chapo" Guzmán), también provocó una intensa lucha entre grupos criminales por el control de las rutas de tráfico. Esta estrategia militarizada resultó en un aumento significativo en la violencia en el país, con altos índices de homicidio y el surgimiento de numerosas confrontaciones entre cárteles. Se estima que más de 100,000 personas murieron en el contexto de la violencia relacionada con el narcotráfico durante su mandato.

Durante el mandato de Felipe Calderón el número de muertes por violencia, por cada millón de habitantes, aumentó de 20 a 200, es decir , un 900 por ciento, a razón de un 150 por ciento de crecimiento anual. (ver gráfica)

Número de muertos por millón de habitantes 1980-2025
Número de muertos por millón de habitantes 1980-2025

La estrategia de Calderón fue criticada tanto a nivel nacional como internacional por no contemplar adecuadamente las causas subyacentes del narcotráfico y por el impacto negativo sobre la población civil.

A su vez, Enrique Peña Nieto prometió un enfoque más integral y menos militarizado en la lucha contra el narcotráfico. Se estableció la "Estrategia Nacional de Seguridad", que buscaba abordar no solo la violencia, sino también las causas socioeconómicas de la criminalidad. Se promovió la creación de nuevos cuerpos de seguridad, como la Gendarmería Nacional, como un mecanismo para abordar la violencia en lugar de depender exclusivamente del ejército. Aunque continuó con las capturas de altos líderes de cárteles, su enfoque priorizó la reducción de la violencia en lugares concretos, mediante operaciones más estratégicas y menos enérgicas que las de Calderón. A lo largo de su administración, también hubo críticas en relación con violaciones de derechos humanos. Incidentes como la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa en 2014 generaron protestas y cuestionamientos sobre la efectividad y la ética de las políticas de seguridad de su gobierno. Aunque algunas cifras de violencia mostraron una reducción a corto plazo, hacia el final de su mandato, también se observó un resurgimiento de la violencia, con cárteles como el CJNG ganando poder e influencia.

Durante el mandato de Enrique Peña Nieto, el número de muertos por violencia por cada millón de habitantes aumentó de 140 a 260 muertes por millón de habitantes; es decir, un 85 por ciento, a razón de un crecimiento de 15 por ciento anual.

Dados los resultados anteriores, que indican que mientras más se lucha contra la violencia provocada por el crimen organizado el número de muertos aumenta, Andrés Manuel López Obrador (@lopezobrador_) instauró un enfoque que busca desescalar la violencia en lugar de intensificarla. Su lema "abrazos, no balazos" reflejó un intento de priorizar la paz y la reconciliación sobre la confrontación militar directa con los cárteles.Su administración enfatizó la necesidad de abordar las causas subyacentes del narcotráfico, como la pobreza, la falta de oportunidades y la desigualdad. A través de programas sociales y desarrollo económico, buscó ofrecer alternativas a los jóvenes que se ven atraídos por el crimen organizado. A diferencia de Calderón y Peña Nieto, AMLO priorizó la creación y fortalecimiento de una policía civil en lugar de depender del ejército. Se promovió la formación de la Guardia Nacional, una nueva fuerza de seguridad que combina elementos de la policía federal y de las fuerzas armadas, con un enfoque en la seguridad pública y la prevención del delito. A diferencia de los gobiernos anteriores, que centraron parte de su estrategia en la captura de líderes de cárteles, AMLO optó por una estrategia más cautelosa en este aspecto. Si bien las capturas ocurrieron, no fueron el enfoque principal.

Durante su mandato , Andrés Manuel López Obrador disminuyó el número de muertes por violencia por cada millón de habitantes, de 250 a 200 ; es decir, disminuyó un 20 por ciento, a un promedio anual de un -3.3 por ciento.

El actual gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, dados los resultados de AMLO de disminuir la violencia enfatizando en un rotundo NO a la lucha armada, luchando contra las causas subyacentes también, ha construido sobre esta estrategia pero además intensificando la captura relativamente pasiva de narcotraficantes, sometiéndolos a juicio penal, y desmantelamiento de sus operaciones

Durante el mandato de Claudia Sheinbaum el número de muertes por violencia por cada millón de habitantes disminuyó el primer año, de 250 a 170, es decir, un 25 por ciento.

Conclusión: Durante el primer año del gobierno de Claudia Sheinbaum se ha revertido dramáticamente la tendencia de muertes por violencia en nuestro país, en relación con el gobierno de Felipe Calderón, de un índice positivo de crecimiento anual de un 150 por ciento durante su período, a un decremento anual de un-25 por ciento. De continuar así, su mandato obtendría una DISMINUCIÓN de 150 por ciento del número de muertes por millón de habitantes, que la llevaría a que terminaríamos 2030 con 45 muertos por violencia por millón de habitantes, a niveles anteriores al período de Felipe Calderón.

Yo creo pues, que hemos iniciado una época de intensificación del AMPARO de la población mexicana, a raíz del DESAMPARO que provocaron regímenes anteriores como resultado de su política de lucha armada contra el crimen organizado.

El crimen organizado ha intensificado su ataque contra líderes mexicanos, como el ocurrido recientemente con el asesinato de Carlos Manzo. Pero yo considero que estos ataques responden a políticas frontales de violencia en contra del crimen organizado, como la seguida por el alcalde asesinado, en contraposición a la de no violencia de @ClaudiaShein.


Google news logo
Síguenos en
Patricia Armendáriz
  • Patricia Armendáriz
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.