Durante la campaña, los aspirantes a diputados locales de Morena trajeron como principal bandera propagandística el retiro de la concesión a la empresa Agua de Puebla. En el estudio de Canal 6 más de uno aseguraba que una vez llegando al Congreso irían con todo para modificar ese tema.
Lo peor del caso es que muchos de ellos desinformaron a los ciudadanos, al asegurar que el problema de la distribución del vital líquido se solucionaría regresándole al estado el control de esa empresa, sin tomar en cuenta el impacto que una decisión de esa naturaleza traería sobre las finanzas públicas.
Este lunes el gobernador electo Alejandro Armenta Mier dijo que está revisando los términos y las inversiones que la concesionaria deberá cumplir, antes de llegar una eventual cancelación del vínculo con la empresa, porque hacerlo costaría más de 8 mil millones de pesos.
En este sentido, agregó, se encuentran trabajando en la elaboración de un diagnóstico sobre las inversiones que ha hecho la empresa para garantizar el suministro del vital líquido en la zona conurbada.
Lo que algunos expertos señalan es que ese costo sería mucho mayor, porque el gobierno estatal tendría que invertir en contratar el equipo y personal para operar el sistema, lo cual tampoco es sencillo y representa un problema que en estos momentos no les conviene asumir.
Esta cifra (8 mil millones de pesos) representa el triple de lo que la empresa pagó por ella, además de que también se aplicarían diversas multas en contra de la administración estatal. Es decir, tampoco sería un gran negocio para el gobierno estatal. En todo caso, la autoridad debe presionar a la empresa para que cumpla con todos y cada uno de sus compromisos.
Como sucede en cada proceso electoral desde que se otorgó la concesión, el tema de Agua de Puebla es recurrente entre los políticos, y por más que hayan prometido cancelarla, eso no sucederá, al menos hasta que Armenta mande la señal, una vez agotadas las negociaciones con la empresa.
Por eso la ciudadanía no confía en los políticos, que con tal de obtener el voto son capaces de decir cualquier cantidad de mentiras. Agua de Puebla debe mejorar el servicio a los miles de hogares, pero de eso a suspender el contrato hay un largo camino por recorrer.