La temporada de graduaciones está en su apogeo, por lo que para unos todo es ganar ganar y para otros, gastar gastar.
Ya se puede observar en los diferentes municipios como sus primeros cuadros son muy visitados, ya que es el momento en que muchos padres de familia tienen que acudir a comprar la ropa, accesorios y zapatos que habrán de utilizar quienes se gradúan, ya sea de kínder, preprimaria, primaria, no se diga de secundaria, preparatoria y universidad.
Pero no solamente es la vestimenta, también hay que invertirle en la toga y el birrete, algo que antes no se usaba, pero que ahora es una obligación y su renta no es nada económica.
Pero los mismos papás, tíos, demás familiares y padrinos, saben que también tienen que aportar para la causa, por lo que los gastos en regalos se tienen que hacer y es que para muchos quienes terminan su ciclo escolar se lo merecen y más si obtuvieron buenas calificaciones.
Este mes es cuando los comerciantes aprovechan para sacar algo de dinero, ya que es cuando tienen ventas considerables, principalmente con la ropa para las niñas y jovencitas, quienes ocupan vestidos para entrega de documentos y luego por la noche, para la fiesta de graduación, la cual tuvo que ser pagada con anticipación por los papás, quienes saben que hasta un lugar para los compadres, invitados y uno que otro gorrón hay que pagar.
Hay jóvenes que no tienen llenadera, ya que saben que en los salones la fiesta se termina a las dos de la mañana, por lo que para seguir disfrutando, no dudan en contratar una quinta, así como a un buen taquero y con buena música que siga la diversión.
Los comerciantes no solamente venden ropa, también saben que es el momento para ofertar sus arreglos florales, sus muñecos de peluche y no se diga quienes ofrecen desde equipos de telefonía celular, hasta un buen perfume, unos aretes o una bonita gargantilla.
Quienes tienen salones de fiesta, aprovechan la temporada, ya que durante todo el año se la viven de bodas y quince años, pero en el mes de julio es cuando aparecen las graduaciones por todos lados y muchos se celebran cualquier día de la semana.
Hay que disfrutar del momento, hay que sacar las tarjetas de crédito y volverse a endeudar y los comerciantes, hacer su agosto en el mes de julio.
Walter.juarez@milenio.com