Esta semana queremos presentarles una reflexión rápida.
En la última década, la humanidad ha sido testigo de avances tecnológicos impresionantes: la proliferación de los smartphones, la expansión de la nube, la llegada del Internet de las Cosas y la consolidación de redes 5G.
Sin embargo, ninguno de estos hitos ha provocado un impacto tan profundo y acelerado como el que hemos visto en las herramientas de Inteligencia Artificial (IA) desde el 2023 hasta hoy.
Si bien los avances previos sentaron las bases para una sociedad digitalmente conectada, la IA ha impulsado una transformación radical en la forma en que interactuamos con la información, automatizamos procesos y tomamos decisiones.
Herramientas como los modelos de lenguaje generativo, los sistemas de visión computacional y las plataformas de automatización inteligente han dejado de ser promesas futuristas para convertirse en realidades cotidianas que inciden directamente en la vida diaria de millones de personas.
A diferencia de innovaciones como el salto de 3G a 5G o la adopción masiva de dispositivos inteligentes, los progresos de la IA han ocurrido a una velocidad vertiginosa.
En solo dos años, hemos pasado de experimentar con chatbots y asistentes virtuales limitados, a colaborar con sistemas capaces de redactar textos complejos, analizar imágenes médicas y hasta crear obras artísticas en cuestión de segundos.
El aprendizaje automático, que antes requería recursos técnicos y económicos considerables, hoy es accesible incluso para pequeñas empresas y usuarios individuales.
Este ritmo de evolución no tiene precedentes.
Mientras que la adopción del smartphone tardó casi una década en ser universal y el internet necesitó años para permear en todos los ámbitos de la sociedad, la IA está revolucionando industrias enteras en cuestión de meses.
El presente nos desafía a pensar críticamente sobre la ética, el empleo y la educación en un contexto donde la tecnología ya no solo nos asiste, sino que colabora y aprende junto a nosotros.
En conclusión, el avance de la IA del 2023 a hoy supera, en impacto y velocidad, a cualquier innovación tecnológica de los últimos diez años.
Y con la tendencia de la multiplicación de los Agentes de IA, este avance se incrementara exponencialmente en el corto plazo.
