Para los aficionados de Santos Laguna que tenían la ilusión de ganarle a Tigres en el estadio Universitario se convirtió en pesadilla.
Sólo hicieron falta once minutos para que los locales terminaran con las esperanzas de que el equipo dirigido por Guillermo Almada obtuviera un triunfo en San Nicolás de los Garza.
Tigres no tuvo problemas en quitarse de encima la presión alta de Santos Laguna. La experiencia de “Chaka” Rodríguez, Salcedo, Ayala y Torres Nilo solventaron la incomodidad de los atacantes visitantes.
El segundo gol de los felinos es una muestra de la capacidad de los jugadores de Tigres para quitarse la “presión alta”; salieron del lado izquierdo de su propia defensa para sacar el balón al medio campo y enviarlo por el lado derecho, en donde Gerardo Arteaga no lo pudo interceptar, permitiendo la conducción del balón, centro a segundo poste y remate de Gignac.
El equipo santista ha tenido deficiencias defensivas desde la jornada 1, las cuales fueron cubiertas por los resultados pero, en los últimos dos partidos, esas deficiencias salieron a la luz al no tener la protección de la ofensiva.
La escuadra albiverde sorprendió a la Liga Mx con la “presión alta” pero desde el juego que perdió ante Necaxa, se nota que los rivales lo tienen estudiado; unos con mayor y otros con menor capacidad para hacer daño, pero todos han tenido sus momentos de poner en apuros la zona defensiva de Santos Laguna, la cual ha recibido dos goles en promedio en los últimos cinco juegos.
Cuando comenzaba el torneo comenté que el conjunto lagunero iba a llegar hasta a donde Brian Lozano le alcanzará su punto alto de rendimiento, pues el uruguayo ha dado muestras que de un drástico descenso en su nivel de juego, en los juegos frente a Pumas y Tigres, lo que ha provocado que no se anote gol en los últimos 180 minutos.
Haber perdido por goleada ante Tigres genera enojo, preocupación e incertidumbre en los próximos doce días en que no habrá actividad por la fecha FIFA.
Contrario a lo que sucede en Ecuador, en la Liga Mx el nivel de competencia en parejo y los equipos ajustan rápido para anular al rival. Si Santos Laguna no encuentra pronto una variante ofensiva y solidez defensiva el torneo se puede tornar en un trago más amargo del que se vivió el pasado sábado.