A raíz de exponencial crecimiento de tiendas de conveniencia en casi todo el país, muchas misceláneas o tienditas cerraron sus puertas después de décadas de dar servicio, principalmente en los barrios.
Mucha gente, incluyendo el suscrito, al ver dicha irrupción de tiendas de conveniencia, optamos por seguir consumiendo en las tradicionales tiendas de abarrotes o misceláneas, pues consideramos que la competencia aunque libre, era desleal desde el punto de vista del colosal capital invertido en las nuevas tiendas de conveniencia.
Si bien es cierto que el sol sale para todos, y al margen del gran capital invertido en locales exprofeso, refrigeradores, estantería, baños, estacionamiento y demás accesorios necesarios para atención al cliente, la mercancía y servicios que se ofrecen son de primera calidad, es decir, si algún producto está caduco o sale rancio, al cliente se le devuelve el dinero o se cambia el producto.
Desafortunadamente la tiendita de la esquina, que aún sobreviven, no cuenta con los aparatos frigoríficos para conservar los productos lácteos, refrescos o cerveza tal vez un pequeño refrigerador que no se da abasto en temporada de calor, tampoco poseen aire acondicionado para climatizar el local y preservar más tiempo productos como papas y botana en general; tampoco poseen terminal bancaria.
En algunas tienditas es muy común que productos como cacahuates, papas o botana en general salga rancia, inclusive los lácteos se venden ya caducos, y al reclamar al tendero opta por no aceptar dicha merma y cambiar el producto o regresar el dinero, esta actitud les resta clientes.
La gran ventaja que tienen las misceláneas, es que ellos son los dueños del negocio, por lo tanto, deben aprovechar a tener un trato personalizado y amable con sus clientes, pues a muchos los conocen desde niños de nombre o apodo, por lo que al recibir la reclamación de algún cliente, deben cambiarlo o regresar el dinero, toda vez que el proveedor en su mayoría absorbe la merma.
Un trato amable y honesto, suple las deficiencias de infraestructura y mobiliario con que cuentan las grandes cadenas nacionales e internacionales, muchas tienditas o misceláneas han sobrevivido aun teniendo enfrente algún Oxxo o Seven Eleven, y su éxito se debe al buen trato que reciben sus clientes de toda la vida, aunado al orden y limpieza de sus tiendas.
Los clientes eligen preferentemente, donde los traten bien y respeten.
