Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, o lo puede perder, muchos connacionales y extranjeros su sueño es trabajar y radicar en EE:UU, tienen la creencia que al poner un pie en Estados Unidos, a las pocas semanas o meses sus problemas económicos empezarán a desaparecer, craso error, si bien es cierto que ganan en dólares, también gastan en dólares.
Su presencia o estancia en dicho país, requiere de un gran esfuerzo, las jornadas son agotadoras, también es cierto que pagan por hora trabajada, la misma está demasiado supervisada, ya sea por un gerente, supervisor o capataz, los cuales al verte distraído de inmediato te amonestan o eres despedido.
En México, a partir del Tratado de Libre Comercio pactado en época de Salinas de Gortari a la fecha, paulatinamente todo cambió para bien; lo que antes algunos privilegiados conseguían de contrabando, inclusive la despensa básica, ropa, calzado, herramientas, maquinaria industrial y agrícola, ahora es muy común observar que todo se consigue en nuestro país, inclusive hasta más barato y facturado, para declarar al SAT al pagar los impuestos.
Estos privilegios que todas las clases sociales estamos disfrutando por tener abundancia de dichos bienes, son herencia de sexenios pasados, ya sean priistas como panistas.
Lo preocupante es que el actual gobierno nos exhorta a ser demasiado austeros, inclusive a practicar la pobreza franciscana; lo congruente sería que predicaran con el ejemplo, tanto ellos como sus familiares.
Ha estado circulando en redes sociales algunos videos de extranjeros, algunos cubanos, venezolanos, nicaragüenses y muchos centroamericanos que visitan nuestro país, ya sea como turistas o como migrantes rumbo al “sueño americano” dónde se sorprenden al entrar a un centro comercial, que para los mexicanos es hoy muy común acudir y abastecerse de víveres o de productos domésticos y limpieza, a muchos de ellos los asombra la abundancia.
Al entrar al supermercado o centro comercial, su sorpresa es mayúscula, pues se admiran de la abundancia y buena calidad que gozamos los mexicanos en todo y de la cuál ellos carecen, como frutas, legumbres, carnes rojas (res, puerco, cordero, caprino, conejo, etc.), pescados de todas las especies y tamaños, latería o conservas de todo tipo, lácteos, carnes frías, infinidad de pan de dulce y pan blanco, ropa y calzado de todos los precios y calidad.
La narración en el video de los visitantes extranjeros, además de asombro, se les observa sentimientos encontrados, pues se reclaman ellos mismos de lo “inocentes” que han vivido o sobrevivido a sátrapas en países socialistas y comunistas, inclusive algunos hasta se les anegan los ojos al hablar de lo ingenuos que han sido durante años.
En México cada día estamos mejor, no perdamos estos privilegios que nos quieren arrebatar, pregonando austeridad para el pueblo, más no para machuchones del gobierno y sus familiares.
“Imponen cargas que ellos mismos no son capaces de llevar, que ni con un dedo quieren moverlas” S Mateo 23:4-15