Cultura

Del sexo escaso

La generación Z está sujeta a la dimensión legal del placer. ESPECIAL
La generación Z está sujeta a la dimensión legal del placer. ESPECIAL


Los integrantes de la generación Z, los nacidos entre 1990 y 2010, tienen menos sexo que las generaciones anteriores, pero las mismas ganas. El declive del acto sexual está, desde hace tiempo, rigurosamente documentado. Una pareja desnuda en la cama empieza a convertirse, como diría el poeta Leonard Cohen, en un “deslumbrante artefacto del pasado”.

¿A qué se debe esta recesión sexual? Carter Sherman, una periodista del diario inglés The Guardian, especialista en salud sexual, entrevistó a más de 100 personas, de menos de 30 años, y su trabajo exhibe un inquietante panorama que le alcanzó para publicar un libro del que la revista Wire da cuenta (“How Social Media is Fueling Gen Z’s Sex Recession”, julio de 2025). 

Sherman observa a su propia tribu, tiene 31 años y es parte de la Generación Z. Las redes sociales, nos dice esta investigación, tienen gran responsabilidad en el fenómeno, con énfasis en las apps para ligar, porque obligan al usuario a comparar sus cualidades y sus calidades con los demás y, generalmente, nadie sale bien parado en esa comparación. Otro elemento, ya muy señalado, es la omnipresencia del porno en las pantallas, que ofrece un paisaje erótico que le viene grande a cualquier persona, digamos, normal. Sherman advierte de la ligereza con la que los Z le hacen el choking (el estrangulamiento como afrodisiaco) a sus parejas, imitando a los garrulos del porno. 

Pero la verdadera clave del declive es la politización del sexo; en el siglo XXI, observa Sherman, dos personas jóvenes y sexualmente saludables que copulan de mutuo acuerdo, lo hacen bajo el influjo del consentimiento, del “sólo sí es sí”, del MeToo, etcétera. Ese acto que en el siglo XX era puro gozo, ahora tiene una dimensión política y legal que puede desembocar en la cancelación, o en el delito, y esto termina cohibiendo. 

La politización del coito evita, desde luego, muchos abusos, al mismo tiempo que inhibe el acto de dos que sólo buscaban compartir el placer del sexo. Antes era el ojo de Dios el que se instalaba en medio de la pareja, en ese mismo lugar que hoy ocupa el brazo de la ley.


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Jordi Soler
  • Jordi Soler
  • Es escritor y poeta mexicano (16 de diciembre de 1963), fue productor y locutor de radio a finales del siglo XX; Vive en la ciudad de Barcelona desde 2003. Es autor de libros como Los rojos de ultramar, Usos rudimentarios de la selva y Los hijos del volcán. Publica los lunes su columna Melancolía de la Resistencia.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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