Sin temor al qué dirán, el triunvirato barato del PRIANChu salió a hacer su tradicional numerito de lágrimas de creelcodrilo (Noroñas dixit) para defender al fiscal de Morelos, conocido maleante de la zona, cómplice del exgober precioso, el nada grato de Graco Ramírez. Igual que la Guerrillera Trendy, Denisse Dresser, y entre otros Paleros de Alazraki como Sergio Sarmiente que, antes que analizar las acusaciones que pesan sobre Uriel Carmona, en materia de feminicidios, victimizaciones y revictimizaciones. Sin olvidar cómo ha solapado al ingrato de Graco, cual si fuera su niñera. Y claro, como en el caso de García Luna Productions, convirtieron al fiscal en héroe y en víctima del comunismo como el Obispo de Cuernaroca, se pondrán una playera que diga: “¡Uriel, hazme un hijo!”.
Sin embargo, los porristas de la derechairismo en éxtasis deben sentirse desamparados porque en el PRIANChu está la cosa caníbal. Armada de una falsa inquietud, la señora X habla sobre una sospechosa acumulación originaria de firmas a favor de Santiago PRIL, Chiflano Aureoles, Beatriz Paredes y Kike de la Madrid. O sea, eso es imposible, cómo se atreve a ejercer un malsano sospechosismo en contra de unos partidos que siempre han demostrado su heroica probidad, su total sentido del escrúpulo y que nunca harían trampas electoreras ni lo volverían a hacer.
Y peor aún, la cosa se pone al rojo vivo por la incidencia del maldito virus comunista que es muy insidioso, pues se estuvieron peliando Alitititito Moreno y el Moreira Malo en contra de Claudio XXX que provocó a los priistas al decir que el PRI es bien corrupto, algo que casi nadie piensa. Pobre mi Claudio, uno pensaba que era el dueño del circo pero con unos cuantos tuits de extorsión me lo doblaron de manera vergonzosa.
Y como si no fuera suficiente la lucha fratricida, el panista Jorge Preciado, otrora líder de los senadores de Acción Nacional y reconocido por películas como “¡Ánimo Montana!”, dice que la elección de la candidatura del frente está más arreglada que las peleas de Kahwagi y el Canelo juntos, para que gane la senadora Gálvez. Y, peor aún, exige la renuncia de Markititito Cortés (apoyo la moción por ser un inútil sin remedio) y alega que AMLO puso a la señora X como candidata, así que la oposición hace lo que él dice.
Y espérense a que Kinky Téllez comience a tirar flechazos explosivos contra los huipiles que la mandaron al rancho del Peje. ¡Muajajajá!
¡Kestapasanda!
