El término Sororidad comienza a acuñarse desde que Miguel de Unamuno lo publicó en la revista argentina Caras y Caretas en 1921.
La Real Academia de la Legua Española define como: Relación de solidaridad entre las mujeres, especialmente en la lucha por su empoderamiento.
Este término poco conocido es practicado en la denominada segunda ola del feminismo (1960-1980) en los Estados Unidos, donde grupos de mujeres se formaron en torno a intereses en común para prestarse apoyo mutuo y comprensión, empleándose la palabra sisterhood o sorority para definir estas relaciones entre iguales.
Así que hoy abordaré tan interesante tema a fin de poder mostrar las mejores prácticas para desarrollarla, ya que hoy en día, no es solo una moda, sino un nuevo estilo de vida que mejorará considerablemente las relaciones entre mujeres y, si lo trasladamos al tema empresarial, las ventajas se potencializarán y por lo tanto el resultado serán mujeres más exitosas, realizadas y que contribuirán considerablemente en el desarrollo del país con la creación de empleos y el crecimiento económica de la nación.
“Las Mujeres son Enemigas por Naturaleza” y esto decía el más célebre misógino del siglo XIX Arthur Schopenhauer y es triste constatar que pleno siglo XXI algunas mujeres practican con singular alegría el arte de “destazar” a sus propias congéneres, sin embargo, en esta aportación mencionare como la Sororidad es una práctica que debe de fomentarse entre mujeres.
Entendamos pues que el término Sororidad se refiere: Solidaridad entre mujeres que propicia la confianza el apoyo mutuo, coexistencia frente a los problemas sociales que se presentan en sociedad.
La sororidad es un valor, como la fraternidad, pero vinculada a la unión, respeto y amor entre el género femenino.
Comenzaré mencionando lo que NO es Sororidad: no es ser feminista extrema o radical (feminazi) y mucho menos ver al hombre como el enemigo público número uno, tampoco se refiere a que todas las mujeres tienen que ser amigas, se tengan que caer bien o se forcé quererse, se trata de buscar una hermandad sin rivalidad.
Así que la Sororidad se puede practicar desde los siguientes fundamentos los cuales transmito a la comunidad femenina:
1. Dejen de juzgar su apariencia física y la de las demás mujeres.
2. Tengan siempre presente que las decisiones sobre su cuerpo son individuales y propias, eviten juicios sobre quienes han decidido o no tener hijos.
3. Respeten las formas en las que las demás eligen vivir su sexualidad, omitan calificar y/o cuestionar estas elecciones.
4. NUNCA justifiquen el acoso o la violencia hacia otras mujeres, ni duden de sus testimonios, prohibido decir “ella se lo buscó”.
5. Eviten reproducir ideas y juicios sobre ustedes, como que son débiles, dramáticas, histéricas, etc.
6. Sean amables y generosas con las demás, sean esa persona que sus amigas llamarían sin importar el problema que tuvieran.
7. Cuando una mujer les quiera hablar mal de otra, explíquenle el grave error que está cometiendo al dejar de ser una aliada.
9. Generen y promuevan una red de seguridad entre ustedes,
10. Si una amiga o compañera emprende o tiene una empresa, cómprenle y en la apertura organicen un Business Shower, tal y como lo hacen con la espera de un bebé.