Repantigado en el mullido sillón del amplísimo estudio, Gil leyó en su periódico El Universal que el escritor Guillermo Sheridan había puesto en un problema serio al Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, flamante miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Sheridan demostró con ejemplos contundentes que el Fiscal plagió abundantemente para publicar su libro (es un decir) Guillermo Prieto (Una biografía). El Fiscal se despachó con el cucharón del puchero robando episodios completos de dos libros: Guillermo Prieto y su época, de Salvador Ortiz Vidales, y Vida y obra de Guillermo Prieto, de Malcolm D. McLean. El volumen de la escandalosa fusilata forma parte de los cinco libros con los que Gertz Manero fundamentó su ingreso al SNI, Nivel III, del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.
Allá donde esté, don Guillermo Prieto se preguntará qué pasa de este lado del mundo y por qué la bulla, o la bióloga Álvarez-Buylla, o como se diga. Nada, don Guillermo, que acá un importante miembro del gabinete de Liópez Obrador resulta que se robó el contenido de dos libros sobre su vida y su obra para hacer uno nuevo, pero más bien viejo, sobre su obra y su vida. Sí, don Guillermo, se llama plagio y en cualquier época es imperdonable, y mucho más si con ese material se abren las puertas de la academia y el reconocimiento de una de las instituciones culturales más importantes del país.
Sí, don Guillermo, luego Gamés le explica qué pasa acá de este lado. Usted descanse en santa paz. Se dice que la musa callejera persigue a don Alejandro, ésa que inspiraba al Güero Prieto, que así le decían, y que no es otra que la ciudad de México. ¿Le retirarán al Fiscal su membresía al SNI? ¿Acusarán al neoliberalismo de que unos párrafos hubiesen volado de un libro de un autor a otro libro de otro autor? ¿Nadie sabe, nadie supo? Usted diga.
Queremos Gatell, Gatell, Gatell
Acabarán por volver loco a Gil. Según su periódico El Financiero en una nota de Diana Benítez, el aumento en 22% de los casos de covid lleva a México a un tercer repunte. Dijo López-Gatell: “Hay repunte, el tercero a lo largo de la epidemia, dos en 2020, uno en 2021 después de medio año en que se redujo la pandemia (…) las hospitalizaciones y las defunciones no crecen a la misma velocidad, crecen de una manera mucho más controlada en la medida en que la vacuna ha hecho su efecto”.
Ahora mal sin bien, el corazón simple de Gil pregunta: ¿quién decidió poner en verde a la Ciudad de México? A donde voltea Gilga todo está abierto y atestado, lleno de personas hartas del confinamiento. Correcto: la economía mejorará y los contagios subirán y, en consecuencia, las muertes aumentarán. Inmunidad de rebaño, o como se llame, hay un repunte, dice López-Gatell.
Fut
La final de la Eurocopa se ha decidido. Inglaterra derrotó, para fortuna del futbol, a los daneses. Con trabajos y por muy poco, pero los sometió. Tres ingleses armaron el asedio: Harry Kane, Harry Maguire y Raheem Sterling. Dos goles a uno sobre los daneses, rápidos, pero fríos como la nieve; algunas veces contundentes, pero torpes al final de la jugada; sin emoción, mueren los creadores.
Así las casas (muletilla patrocinada por Bartlett Chu-chu-chu), los italianos enfrentarán a los ingleses en un encuentro de abolengo. Gilga sigue pensando que los azzurri guardan armas letales en el vestidor. Dejaron fuera a Bélgica que no era una pera en dulce y a España, una de las favoritas para ganar el torneo. Una lástima que Spinazzola esté fuera por una lesión, pero les quedan Chiesa, Inmobile, Insigne y desde luego Bonucci y Chielini y, Gil se pone de pie: Verratti. Por su parte, Inglaterra arrasó a Ucrania 4 a 0.
Si los dioses del césped lo permiten, Gil podría ver un gran juego. Deje las mañaneras y prepárese para la final de la Eurocopa. Si quiere usted una botana, el sábado vea la final de la Copa América: Brasil vs. Argentina.
Todo es muy raro, caracho. Como diría Frank Capra: “Una corazonada es la creatividad tratando de decirte algo”.
gil.games@milenio.com