El debate en el Senado para la designación del ex gobernador Omar Fayad como embajador en Noruega desató las pasiones y los adjetivos fuertes en la Cámara Alta.
El hecho de que un ex priista de reciente salida, que hasta hace poco representó uno de sus principales activos y capital político, incluso pensando en 2024 para la presidencia, ahora sea parte de los convocados por la 4T para sumarse al servicio diplomático, no fue muy bien tomado por el PRI y PAN.
Senadores como Emilio Álvarez Icaza, Germán Martínez, así como Claudia Anaya, subieron a la tribuna para despotricar contra Fayad y advertir la ligereza con que consideran se ha tomado al servicio exterior mexicano. Faltos de memoria, se olvidan que por generaciones, el envío de políticos como embajadores ha sido moneda de cambio patentada por el PRI y el propio Acción Nacional, que llenaron las sedes diplomáticas de personajes que estaban mejor fuera del país.
Tras el nombramiento de Fayad, tuvieron que ser los propios morenistas los que salieron a defender la propuesta del presidente López Obrador, e incluso de forma elocuente como en concurso de oratoria, como le gusta al senador Ricardo Monreal. Con Fayad siendo defendido por Morena, se abre una nueva herida en la ya lastimada piel de los priistas hidalguenses que siguen con el coraje de lo ocurrido en 2022 con la elección para el gobierno en donde ganó el actual mandatario Julio Menchaca. El propio Monreal aseguró que Fayad no entregó la plaza en Hidalgo, estado donde se gestó un movimiento que gestó a Julio Menchaca a ganar por más de 30 puntos. “Me parece osado insultarlo ¿Con qué calidad lastiman personas? No les gusta, no lo voten, ojalá y él pudiera defenderse”. El punto máximo llegó con la votación en que la mayoría se impuso con 70 validaciones por 33 en contra, un buen número si se considera un asunto que no era para tanto, hasta que el nombre de Omar Fayad fue mencionado. ¿Qué hará Fayad desde Noruega para estar inmerso en la política hidalguense y las elecciones municipales y del Congreso?, pronto lo habremos de saber.