Luego de las comparecencias de los secretarios del gabinete de la gobernadora Delfina Gómez, durante las sesiones desglosa del segundo informe de la administración 2023-2029, viene el tema más apetitoso de fin de año: la discusión y en su caso aprobación del paquete fiscal para el próximo ciclo anual.
Y claro está, todos tratarán de meterle mano a la propuesta que haga la gobernadora Delfina Gómez del presupuesto de egresos para el 2024. Es obvio que los partidos políticos querrán jalar agua para su molino, tratarán de qué algunos programas tengan menos dinero que otros y que se etiqueten en recursos para los municipios que gobiernan, principalmente los de oposición.
Pero hay algo importante en un tema en el que lo partidos políticos no se quieren meter y que seguramente pasarán por alto: el presupuesto para el Instituto Electoral del Estado de México, ¿por qué? La respuesta es muy sencilla y simple, de ahí reciben poco más de 1000 millones de pesos de prerrogativas y el IEEM dispondrá de 700 millones para su operación.
Es lamentable que se destine esa cantidad a los partidos políticos en año no electoral, y a organismos autónomos como la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, que opera siempre y no en época electoral, solo le den 380 millones de pesos.
O bien, al sector educativo, para aumentar infraestructura de escuelas y el mobiliario o simplemente mejorar las condiciones de los espacios públicos educativos, lo dejan con pocos recursos. Los partidos solamente critican esa reducción, pero no son capaces de decir que reduzcan las prerrogativas.
Otro organismo autónomo, por ejemplo el Sistema Mexiquense de Medios Públicos, que también tiene una operación los 365 días del año, y que de alguna manera es el referente para fomentar la identidad, la cultura y nuestras tradiciones y origen, recibe 400 millones menos que los partidos políticos.
Los partidos políticos no quieren que se toquen sus prerrogativas, pero critican reducciones a los presupuestos de Salud y Educación, si en lugar de ello se pusieron de acuerdo y bajaran los recursos que reciben para destinar parte de ellos a Educación y Salud, otro gallo cantaría.
Pero es algo que no van a conceder, no lo van a tratar durante la discusión del paquete fiscal 2026, porque no les conviene; no pueden quedarse sin dinerito para subsistir.
Es por eso que rechazan de alguna manera la Reforma electoral de la presidenta Claudia Sheinbaum, en la que propone reducir las prerrogativas y también los espacios plurinominales y que la representación proporcional sea pura y no repartición de cuotas.
Ya veremos de qué manera distribuyen el presupuesto los diputados, y cómo se saldrán con la suya con las prerrogativas, sin importar que a sectores estratégicos les bajen el dinero para el próximo año.
Aquí veremos de qué están hechos los diputados del partido gobernante para que se reduzcan las provocativas a los partidos, ya que no es año electoral. Puedo apostar doble contra sencillo a que los partidos políticos, obviamente para tener los reflectores puestos, harán la crítica que corresponda, sin hacer antes una autocrítica propia. ¿No cree usted?
