Que cuando pensábamos que en el panismo poblano iba mal, salió Paola Angón para demostrar que sí se puede estar peor. Y es que la alcaldesa de San Pedro Cholula anunció que denunciará de manera formal a la dirigente estatal del PAN, Augusta Díaz de Rivera por violencia política de género por difamarla y acusarla durante la pasada campaña electoral además hacerla responsable por la derrota que sufrió la coalición Mejor Rumbo para Puebla en el municipio, donde resultó ganadora la morenista Tonantzin Fernández. Una vez más… “qué bonita familia”.
Que no solo en San Pedro Cholula se “cuecen habas”, también en Puebla capital se escribe un nuevo capítulo de la novela “panistas contra panistas”. Y es que resulta que la diputada local Lupita Leal solicitó al alcalde Adán Domínguez que dejen de “pintarrajear” el espacio público con su imagen institucional, sobre todo en el pavimento como líneas peatonales, un hecho que el panismo condenó cuando Claudia Rivera pintó de arcoíris las cebras de cruces viales. No hay que olvidar que el Congreso del estado aprobó reformas para impedir que los gobiernos pinten el mobiliario público con los colores partidistas en los que militan o de la identidad gráfica de sus administraciones.
Que por su parte, en el PRI la dirigente estatal, Delfina Pozos reveló que desconoce el paradero de Juan de Dios Bravo, líder municipal del partido quien presuntamente está en la mira por su aparente vínculo con Tania N, ex candidata a diputada plurinominal suplente, vinculada a proceso por delitos de delincuencia organizada. Pozos admitió llevar varios días sin tener contacto con su correligionario, quien por cierto se dice sería el dueño del inmueble en el que se detuvo a la joven política, aunque hasta el momento no enfrenta una denuncia formal ante la Fiscalía.
Que la emblemática ex hacienda de Chiautla dejó de formar parte de la empresa Mision Grand y ahora, regresa a manos del gobierno del estado. Y es que, durante el gobierno de Rafael Moreno Valle este sitio histórico e icónico de Puebla fue concesionado a una empresa privada, pero ya no más. ¿Cuál será ahora su destino? Veremos si es una decisión que toma el gobernador en funciones o el gobernador electo. Vale la pena recordar que este sitio turístico sirvió como escenario de fugaces encuentros matrimoniales de aquellos incondicionales como Gerardo Islas Maldonado (en paz descanse), Juan Carlos Natale y otros políticos y empresarios consentidos de aquel régimen de triste memoria.
