Que apenas habían pasado ocho minutos del Encuentro de Gobernadoras, Diputadas Federales y Locales, Presidentas Municipales y Alcaldesas Electas 2021 cuando Nadine Gasman, titular de Inmujeres, informó que Olga Sánchez Cordero debió retirarse de súbito por instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador. Quien parecía estar enterado con antelación del relevo en Gobernación fue Ricardo Monreal, quien la víspera afirmó que su liderazgo al frente de la bancada “está más firme que nunca”, aclaración pertinente cuando en menos de tres meses han llegado Gabriel Hernández, César Cravioto y ahora la ministra en retiro, personajes cercanos a Palacio Nacional y el Antiguo Palacio del Ayuntamiento.
Que cuando pareciera que el magistrado José Luis Vargas no dará más de que hablar se le ocurrió pedir vacaciones, casualmente los días en que tendría que apoyar a alguno de sus compañeros para que ocupe la silla de la presidencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, de la que fue destituido, con el fin evidente de no verse obligado a respaldar con su voto a alguien del “G5”, colectivo que se encargó de arruinarlo.
Que la Concamin se convirtió en tiro al blanco de la Canacintra, organización empresarial que promueve junto con Coparmex y Concanaco la idea de ser factor de peso a la hora de que se vote la revocación de mandato, en busca de crear un bloque contra el Presidente, porque ven a Francisco Cervantes, titular de la primera, con una “relación muy cercana a la 4T”, que él defiende por ser eso parte de su encomienda con los industriales.
Que a los problemas de imagen que afronta el alcalde de Mérida, Renán Barrera, a raíz del asesinato del joven José Eduardo Ravelo a presuntas manos de policías municipales, a quienes el munícipe defiende a toda costa, se suma otro que ha puesto en jaque a toda su administración con el embargo de Santander por un adeudo de 588 millones de pesos, que por ahora contuvo el ayuntamiento con un acuerdo de pagos en abonos.