Que ayer fue un día de contrastes, porque por un lado el gobernador Jaime Rodríguez mantuvo la postura de las autoridades federales de Salud, en el sentido de no cancelar clases ni conciertos masivos como el de Pa’l Norte en el Parque Fundidora.
Por el lado privado decidieron pasar, como lo hizo el Tecnológico de Monterrey y los colegios privados desde el jueves, a la siguiente fase de cancelar clases y toda concentración que implique riesgos de contagios, al igual que varios municipios metropolitanos como Monterrey, Apodaca, San Pedro y Santa Catarina.
Que en la arena Monterrey, con apenas unas horas de anticipación, se canceló el concierto que Ricky Martin daría anoche.
En tanto, las asambleas anuales de la Coparmex y la Canaco que se celebrarían aquí el próximo jueves 19 fueron pospuestas, mientras corría como reguero de pólvora que, en los dos casos confirmados de Covid-19, se trata de connotados empresarios regiomontanos.
Y ayer algunas empresas no manufactureras optaron ya por la modalidad del home office para sus empleados.
Que Cintermex también decidió posponer, en consenso con los expositores, los eventos programados durante las próximas cuatro semanas, además de restringir los accesos a partir del próximo martes 17.
Y a pesar del fin de semana largo, por el puente del próximo lunes, los regiomontanos están más interesados en informarse sobre las recomendaciones preventivas contra el coronavirus, que en salir de la ciudad.
Que ayer el alcalde de Juárez, Heriberto Treviño, puso en marcha la primera etapa de un gimnasio polivalente en la colonia Santa Mónica con una inversión de 24 millones de pesos, que convocará a decenas de jóvenes.
Al mismo tiempo, el munícipe anunció que se interrumpirán eventos que impliquen concentración de personas y exhortó a los ciudadanos a evitar estas situaciones para prevenir el coronavirus.
O sea, aquí está el nuevo gimnasio, pero por el momento, ¡mejor no vengan!