Que ahora que se ha puesto en boga el combate a la extorsión, y que las autoridades mexiquenses están echando la carne al asador contra los grupos “sindicales” y cárteles que la han institucionalizado como una práctica cotidiana, no vendría mal atacar también un flanco que, en teoría, no debería ser tan complicado de solucionar como otros: la extorsión telefónica desde los penales.
Aquí el “pequeño detalle” es que esas llamadas amenazantes a cada vez más mexiquenses a los que se les aterra orillándolos a hacer depósitos bancarios de diversas magnitudes, provienen en su mayoría de cárceles fuera de la entidad. Y eso que se supone que en todo centro penitenciario debe haber inhibidores de señal para anular los celulares, aparatos que, obvio, deberían estar prohibidos para los reos.
Que todo indica que no es así, pues al menos 69 por ciento del total de los casos reportados provienen de Ciudad de México (de esos, 47% del penal de Santa Martha Acatitla, en Iztapalapa) y 5 por ciento del de Altamira, en Tamaulipas. Imposible que la posesión de aparatos y la libertad para usarlos ocurra sin la complicidad de la autoridad de algún nivel. Probablemente alguien está haciéndose de la vista gorda desde hace ya mucho tiempo.
Que aún sin un gabinete bien definido, habría que poner atención a las señales de cómo se va conformando el equipo de trabajo de la nueva Rectora de la Universidad Autónoma del Estado de México, Patricia Zarza. Algunos pintan para cargos torales en el corto plazo.
Recientemente nombró al doctor José Guadalupe Miranda, director del Centro Universitario Valle de México (asentado en Atizapán de Zaragoza), como enlace para el diálogo con el sector parista estudiantil, con el que por cierto se ha complicado fijar fecha para sentarse a conversar y llegar a acuerdos.
Que otro tema interesante para el análisis político es el regreso a la escena del Senador con licencia Higinio Martínez, quien además de anunciar su retorno a la curul ha hecho una suerte de “gira” por la entidad mexiquense. Explica que el motivo, que quizá para algunos sea importante, es su 50 aniversario de actividad política. ¿Qué habrá entre manos?
