Que una nueva intentona de las autoridades de la UAEH por frenar el paro estudiantil es convocar a las votaciones en cada instituto donde se llama a participar y pedir que por mayoría se vuelva a las actividades y clases, sin importar la demanda o pliego petitorio de estudiantes. Hoy previo a la marcha de la Prepa 1 a la Plaza de Toros, se convocó al mismo ejercicio en la Escuela de Medicina campus Ramírez Ulloa a partir de las 3 de la tarde, situación que pretenden replicar en los planteles tomados. Lo malo es que por redes sociales los alumnos inconformes se notificaron más rápido y los desactivaron.
Que la pregunta del millón sigue siendo ¿en dónde están el rector Octavio Castillo y el presidente del Consejo Estudiantil, Esteban Rodríguez Dávila?, quienes siguen sin hacer pronunciamientos desde hace una semana que se brindó una conferencia de prensa; tras la salida de la directora del IDA, María Teresa Paulín, la principal demanda de todos los pliegos petitorios de estudiantes de la UAEH es que el representante del alumnado ya deje el cargo, se realicen elecciones y se renueve o se transforme por completo dicho espacio.
Que en la colonia El Venado de Mineral de la Reforma la población está más que molesta y preocupada pues sin avisos ni notificación, la Caasim suspendió el servicio desde hace 15 días y la gente no tiene acceso ni siquiera a las famosas pipas que deberían estar atendiendo a dicha zona; los habitantes tienen que buscar cómo sobrevivir para sus necesidades básicas y dicen que ni con los reportes que se hacen al organismo se logra algo, por lo que planean sumarse a las protestas callejeras en Felipe Ángeles o en las inmediaciones de la feria.
Que como en la telenovela “Dos mujeres y un camino”, en el ayuntamiento de Lolotla se vive una historia de intriga y el actor principal es el director de la Policía municipal Miguel Sancho, quien dicen que es ojo alegre y dos mujeres de esa corporación se disputan su amor hasta llegar a los golpes. Ojalá y pusiera más atención a su trabajo, pues este tema ya lo platicaron entre dos diputadas del Congreso local, y lo peor, que como ese hay muchos en donde los uniformados no toman en serio su trabajo.