Que las contradicciones entre Pablo Lemus y la minera Bacis desnudan vacíos en robo de 33 toneladas de metales. ¿Robo o ficción? Versión de Bacis sobre asalto millonario se derrumba ante inexistente ubicación y custodia fantasmal. El gobernador ordena investigar a Grupo Bacis tras desmentir su “robo de oro” sin denuncia ni ruta. ¿Dónde está el oro?
Que se levantó el telón del teatro de la auditoría controlada con la reunión entre la diputada Brenda Carrera (oficialmente morenista, pero con prácticas más afines a Movimiento Ciudadano) y el director del SIAPA, Antonio Juárez Trueba, es un ejercicio de simulación política. Prometer una auditoría externa supervisada por legisladores después del escándalo no restaura la confianza, la convierte en un espectáculo. Más cuando no fueron todos diputados de otros partidos. Carrera en soledad otorga un “voto de confianza” al organismo, pero ¿cómo puede existir confianza cuando no se ha identificado a los autores intelectuales del contrato irregular a Castro?
Que la reciente detención de la ex regidora Carla Verenice “N” en Puerto Vallarta no es un caso aislado de corrupción, sino el síntoma de un sistema que normalizó el desvío de recursos públicos como práctica cotidiana. Su arresto —tras evadir audiencias durante meses — solo expone las raíces que penetran en partidos políticos y estructuras de poder. Como asesora del alcalde Luis Munguía, donde siguió cobrando sin realizar funciones, hasta hace un mes y un grupo de acuadores cercanos a ella ya está en manos de la Fiscalía Anticorrupción.
Que el caos que vive Guadalajara tras cada temporal de lluvias es un síntoma de dos crisis entrelazadas: el cambio climático global y un modelo de urbanización suicida. Las declaraciones del doctor Arturo Gleason Espíndola de la UdeG, exponen una verdad incómoda: la ciudad se ha convertido en su propio enemigo. La impermeabilización del suelo: un suicidio hidrológico, pues el que 70-90% de la Zona Metropolitana de Guadalajara esté cubierta por concreto no es solo un dato: es la raíz del colapso. Esta capa asfáltica bloquea la infiltración natural de lluvia, transformando el agua en torrentes destructivos que saturan drenajes e inundan puntos bajos. Urge el drenaje profundo.
