Que la declaración del alcalde de Tonalá, Sergio Chávez: “Falta una mujer que me atienda”, mientras doraba una quesadilla en un comal, revela un problema social profundo que merece análisis más allá de la reacción inmediata. Acciones así refuerzan los estereotipos: los roles femeninos, perpetuando la idea de que las mujeres son responsables naturales de esas labores normaliza el machismo. Borrar el video de sus redes sin abordar el fondo del mensaje sugiere una respuesta reactiva a la crítica, no una reflexión genuina sobre el contenido.
Que los ayuntamientos de Tonalá y Guadalajara estuvieron atentos a las fuertes lluvias e inundaciones brindando información y asistiendo a la población en los puntos de riesgo, pero el que se durmió y seguro se lo llevó la corriente fue Zapopan, de Juan José Frangie. Las autoridades de Protección Civil están desaparecidas ¡sí alguien las ve repórtenlas para enviarles rescatistas!
Que el diputado federal Alfonso Ramírez Cuellar anduvo muy activo en la Zona Metropolitana de Guadalajara. La visita ocurrió a tan solo unas horas de que el gobernador Pablo Lemus Navarro le diera su machucón a Laura Imelda Pérez Segura, presidenta municipal de Tlaquepaque, a quien le advirtió sancionarla económicamente por haber sido la única en votar en contra de la Agencia de la Basura. Laura Imelda es “hija adoptiva en la política” de Ramírez Cuellar, quien a su vez es el diputado federal más cercano de la doctora Claudia Sheinbaum. Así que lo más seguro es que termine enterada de cómo andan las cosas para Morena en Jalisco.
Que el cariño de Claudia Murguía que tuvo con MC (del alfarismo) se marchitó en el lemusismo porque la coordinadora albiazul anda dura con los naranjas: los de su partido citaron a comparecer a funcionarios sobre el Plan Estatal de Desarrollo. Como no llegó a quien querían los del PAN están pidiendo cancelar las sesiones. El gabinete económico estuvo hace tres semanas en el Congreso, reunión en la que por cierto Murguía solo estuvo 10 minutos y como dice la canción top del Tiktok: “Y se marchó y a su barco le llamó...”.