Que ayer se buscó de manera insistente a integrantes de la fracción parlamentaria del PAN para que dieran su posicionamiento respecto a las adjudicaciones directas realizadas por el Legislativo, como respuesta se recibió una comunicación oficial en la que se aclara que todo lo hecho por el Congreso de Guanajuato está en el marco de la ley, lo cual es cierto, entonces por qué no salir a decirlo directamente.
Y es que el tema de las adjudicaciones directas está claro en la ley de contrataciones públicas, en donde si el monto no excede los 300 mil pesos se puede proceder a una asignación sin que medie la licitación, pero tampoco impide esto último, aunque habrá que decir que para esto también hay manera de saltarse la ley haciendo varios contratos en lugar de una compra consolidada.
Que agregue a todo esto el enrarecido clima en torno a la designación del titular del órgano fiscalizador del Congreso del Estado en donde primero llamó la atención que en la Junta de Coordinación Política MC y Verde se alinearan al fast track y Morena fuera el único partido que rechazara un procedimiento así.
Pero suena fuerte el nombre de Plinio Martínez Tafolla, actual responsable jurídico de la Jefatura de Gobierno de Diego Sinhue Rodríguez, que encabeza Juan Carlos Alcántara, como posible sucesor de Javier Pérez Salazar, lo que enciende alertas pues se dice que Martínez Tafolla por ejemplo cobró 1.2 millones de pesos al Congreso en un juicio laboral poco claro.
Que en la novela de la renovación de la dirigencia del PAN en Guanajuato hoy se registran Aldo Iván Márquez Becerra como aspirante a dirigir los destinos de los azules, acompañado de Juanita de la Cruz para secretaria general y todo parece indicar que será la única fórmula luego del retiro de la senadora Alejandra Reynoso.
Si todo camina como se espera, el dedazo es inminente pues al ser el Consejo Estatal de mayoría dieguista sólo sesionará para validar la fórmula y tan tan, habemus nueva dirigencia sin la necesidad de un proceso democrático.