Victoria es de los municipios donde la Auditoría Superior de la Federación encontró posibles desvíos de recursos en la cuenta pública 2020.
La ASF revisó el manejo de las participaciones federales y no halló la comprobación de un gasto por 6.7 millones de pesos.
Según su dictamen, el municipio recibió $566.6 millones y le revisaron el uso de 407.4 millones, el 71.9% de su presupuesto.
Si bien 6.7 millones es una suma pequeña comparada con el total asignado, no deja de ser un recurso público sin documentación que justifique su uso.
Además, tampoco se puede minimizar la cifra porque las participaciones federales son uno de tantos cajones, de modo que el hallazgo obliga a revisar a fondo el resto.
El órgano fiscalizador señala que “se determinó resultado con impacto económico por 6 millones 705 mil 900 pesos por la falta de documentación justificativa y comprobatoria del gasto”.
Además, se identificaron irregularidades en materia de adquisiciones, arrendamiento y servicios, que se atendieron en el transcurso de la auditoría.
Se determinaron 28 resultados, de los cuales, en 13 no se detectaron irregularidades y 14 fueron solventados por la entidad fiscalizada antes de la emisión del informe. El restante generó un pliego de observaciones.
En el ejercicio de los recursos, el municipio de Victoria, Tamaulipas, infringió la normativa, principalmente la Ley General de Contabilidad Gubernamental, “lo que generó un probable daño a la hacienda pública por un importe de 6.7 millones de pesos”.
Esta cifra representó el 1.6% de la muestra auditada y las observaciones realizadas derivaron en la promoción de las acciones correspondientes.
El 30 de septiembre del 2021, el entonces alcalde panista Xicoténcatl González Uresti se separó del cargo, luego de verse envuelto en una serie de señalamientos por presuntas irregularidades en su gestión. Pilar Gómez entró en su lugar en octubre, mientras el exalcalde era nombrado subsecretario de Calidad y Atención Médica Especializada de la Secretaría de Salud en Tamaulipas. _
