Política

Nuestros pueblos originarios

  • Columna de Ángel Aguirre Rivero
  • Nuestros pueblos originarios
  • Ángel Aguirre Rivero

¿Qué me enseñaron mis hermanos indígenas? Me enseñaron a no creerme importante, a llevar una conducta impecable, a considerar sagrados animales, plantas, mares y cielos, a saber en qué consiste la democracia y el respeto debido a la dignidad humana. Aprendí de su ejemplo la lealtad a sus tradiciones y lengua, el amor por la naturaleza.

Dice Fernando Benítez en su maravilloso libro Los indios de México: “Yo aprendí a amarlos porque crecí entre ellos y conocí de su nobleza y cariño”.

Yo también crecí entre indios, negros y mestizos allá en la costa, jocunda y risueña como puede ser esta región, tal como mujer de cintura angosta y alma ferviente y apasionada de trigueña.

Mi casa paterna siempre estaba llena de amuzgos, eran parte de mi familia; Natalia (Talia) era una centenaria indígena quien se convirtió en una integrante más de mi familia. O “Chanito” García, originario del municipio de Xochistlahuaca, quien era un hermano más para nosotros.

Un día “Chanito” decidió emprender su camino empeñado en formar un nuevo pueblo al que denominó: “África del Sur, Benito Juárez", en donde lamentablemente perdiera la vida.

Conozco y convivo con tres jóvenes amuzgas: Mónica, Sebastiana y Aurelia, todas nacidas en Zacualpan, municipio de Ometepec, con quienes practico mi amuzgo y me comparten de vez en cuando las mejores picaditas (sopecitos) que se pudieran encontrar en todo México, y de vez en cuando un platillo llamado “cabeza de viejo” (de guajolote o pollo), preparado en hojas de plátano fresco, con chile puya y cascabel bañados en yerba santa u hoja santa, el platillo más delicioso de esta zona indígena.

En nuestras charlas me narran historias fascinantes que me animan a escribir un pequeño libro sobre las leyendas de los pueblos afromexicanos y amuzgos.

Me gustan que hablen y conserven su lengua madre; en una ocasión en un centro comercial conversaban animadamente dos de ellas, y algunas personas me preguntaron que de qué lengua se trataba porque se escuchaba muy hermoso, y les expliqué que se trataba de amuzgo, una de nuestras lenguas indígenas que existen en México.

Me duele mucho también por las situaciones que pasan, producto de atavismos machistas como el alcoholismo y la inseguridad en sus comunidades. 

Marely o Aurelia me platicaba cómo a su hermana menor se la llevaron por la fuerza y cuando resultó embarazada la regresaron nuevamente a su comunidad. Le pregunté quiénes lo habían hecho. Y sin temor me contestó: “unos que se dedican a sembrar la yerba, hoy mi hermana con su niña de dos años viven completamente abandonadas”.

Me confirmó que aún persiste en sus usos y costumbres la deleznable práctica de “comprar” niñas o jovencitas a cambio de entregar su virginidad, sin que los organismos de derechos humanos hagan nada.

Me duele que aún sigan explotando su trabajo en la elaboración de sus artesanías, cuyos intermediarios les imponen los precios que ellos quieren.

Por eso cuando fui gobernador con mi esposa Laura del Rocío implementamos un programa de tiendas para sus materias primas, les enseñamos nuevos colores en sus confecciones y les abrimos canales de comercialización directos, como el espacio que mantuvimos durante varios años en el Aeropuerto Internacional de la CdMx.

Lamentablemente, estos espacios se perdieron. Ojalá que las reformas legislativas que se discuten en la Cámara de Diputados consoliden políticas públicas para a miles de comunidades originarias y las incluyan al desarrollo del país.

PD. Buen discurso del presidente AMLO con motivo de los 500 años de resistencia indígena. Me gustó.


Ángel Aguirre Rivero*

* Ex gobernador de Guerrero

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.