Espectáculos

'Donde hubo fuego', de Netflix

Hoy miércoles 17 de agosto es un día de fiesta para todos los que amamos la televisión, las series, las telenovelas y el streaming.

¿Por qué? Porque hoy se estrena en Netflix “Donde hubo fuego”, un espectáculo verdaderamente sensacional.

“Donde hubo fuego” es la obra maestra de Chascas (José Ignacio Valenzuela). Punto.

Este señor es un verdadero genio de la creación de contenidos. Su carrera es muy rica. Está llena de éxitos y de fracasos, pero hasta que no se encontró con Netflix alcanzó su verdadera dimensión al lado de los autores más grandes de este negocio.

Chascas fue el escritor de “¿Quién mató a Sara?”, una Novela con N de Netflix que inmediatamente se colocó en la posición número uno de esta plataforma a nivel mundial.

“Donde hubo fuego” es mil veces mejor porque tanto este señor como Netflix ya se agarraron confianza, porque esto va más allá de las telenovelas y porque la casa productora responsable de esta joya es Argos, la marca detrás de los éxitos más revolucionarios de esta industria desde 1992.

¿A qué me refiero cuando le digo que esto va más allá de las telenovelas? A que tiene un componente altamente melodramático, sí, lo cual le va a fascinar a las audiencias que adoran las telenovelas, pero también tiene un componente de serie de acción que enloquecerá al público que ama esta clase de emisiones.

Ojo: cuando le digo serie de acción, por favor no vaya a pensar que vamos a ver las persecuciones, las explosiones y los balazos que ya hemos visto en decenas de productos latinoamericanos.

No, esto va contra lo mejor de lo mejor de las series de acción del mundo. Desde “Chicago Fire” hasta “9-1-1” y “London’s Burning” pasando por “Rescue me”, “Third Watch” y “Station 19”.

¡Porque qué cree! “Donde hubo fuego” es una serie de bomberos, de bomberos orgullosamente mexicanos. Tuve el privilegio de verla con muchas semanas de anticipación y se lo tengo que decir con orgullo: no le pide nada a nadie.

Cuando usted vea esos casos, esas emergencias, esos incendios, se quedará con la boca abierta, pero cuando los vea en las avenidas más grandes, concurridas y emblemáticas de México, frente a muchos edificios y monumentos que forman parte de nuestro imaginario colectivo, experimentará una emoción nunca antes sentida.

No lo va a creer porque jamás se había hecho algo así, porque jamás se había hecho algo así de bueno y porque jamás se había hecho con el respaldo y la asesoría de nuestros superhéroes del mundo real: los bomberos de la Ciudad de México.

“Donde hubo fuego” es el primer gran homenaje mediático que se le hace a estas personas que a diario arriesgan su vida por nosotros y que, como todos sabemos, necesitan más y mejores condiciones para realizar su noble labor.

Nada más por esta lectura social, “Donde hubo fuego” merece ser vista, pero todavía no le digo lo mejor: el retrato que este título hace de nuestros bomberos no se parece a nada que usted haya visto en los últimos 65 años.

¿Sabía usted que en este país hay bomberas? ¿Cómo es la vida de ellas? ¿Cómo expresan su feminidad?

¿Sabía usted que nuestros bomberos tienen sentimientos? ¿Cómo es el corazón de ellos? ¿Se puede ser un hombre sensible dedicándose a algo tan rudo?

¿Me creería si le dijera que “Donde hubo fuego” es, además, una propuesta muy sexy capaz de unir a las mujeres con los hombres, a las personas maduras con las jóvenes, a las audiencias de televisión abierta con las de streaming y a los heterosexuales con los homosexuales?

No le voy a vender trama para no arruinarle la serie pero me siento ante algo muy completo, muy complejo, diferente.

Nada volverá a ser los mismo después de “Donde hubo fuego” y es en este punto en donde yo tengo la obligación profesional de felicitar a este repartazo de oro encabezado por Eduardo Capetillo, Itatí Cantoral, Esmeralda Pimentel, Iván Amozurrutia y Eduardo Capetillo Gaytán, entre muchas otras celebridades.

Eduardo Capetillo es garantía y aquí está representando algo fundamental en términos artísticos y humanos.

Itatí Cantoral da una cátedra de reinvención actoral simple y sencillamente alucinante. No se la vaya a perder.

Esmeralda Pimentel de aquí seguramente se nos va a ir a Hollywood a quitarle el trabajo a las más famosas estrellas del cine de acción. De mí se acuerda.

Iván Amozurrutia será el próximo Demián Bichir. Imposible verlo así, tan de a de veras, tan vulnerable, y no admirarlo.

Eduardo Capetillo Gaytán (¡Feliz cumpleaños!) está comenzando su carrera actoral con el pie derecho. Algo bueno va a pasar con él. Lo digo en serio.

Luche con todas sus fuerzas por ver ya, pero ya, “Donde hubo fuego” en Netflix. Le va a gustar. De veras que sí.

Álvaro Cueva

alvaro.cueva@milenio.com


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Álvaro Cueva
  • Álvaro Cueva
  • alvaromilenio5@gmail.com
  • Es el crítico de televisión más respetado de México. Habita en el multiverso de la comunicación donde escribe, conduce, entrevista, da clases y conferencias desde 1987. publica de lunes a viernes su columna El pozo de los deseos reprimidos.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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