Al inicio de 2016 el desempleo y la necesidad de trabajar más horas disminuyeron; sin embargo la informalidad laboral registró un aumento, al pasar de 28.7 millones de personas ocupadas en esta modalidad en el primer trimestre de 2015 a 29.1 millones en igual lapso de este año, lo que representó un incremento de 1.5 por ciento.
De acuerdo con las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al interior de la informalidad, se observó que 2.3 millones de personas realizan actividades de servicio doméstico remunerado; 5.7 millones se desempeñan en el ámbito agropecuario, 7.4 millones se ocupan en empresas, gobierno e instituciones y el resto en otras actividades.
En tanto, la población desocupada sumó 2.1 millones de personas; con lo que la tasa de desempleo fue de 4 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), porcentaje menor al reportado en el primer trimestre de 2015 cuando fue de 4.2 por ciento.
La población subocupada, es decir aquella que manifestó disponibilidad o necesidad de trabajar más horas llegó a 4 millones de personas en el trimestre enero-marzo de 2016, para llegar a una tasa de 7.9 por ciento como proporción de la población ocupada, porcentaje inferior a la del mismo lapso de 2015 cuando fue de 8.1 por ciento.