Un entorno favorable para los negocios es esencial para atraer inversión; sin embargo, la complejidad del contexto internacional y los cambios internos del país han generado una percepción cada vez más cautelosa entre los empresarios, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
En su reporte semanal, el organismo destacó que es prioritario fortalecer un ambiente de negocios que facilite la inversión y la creación de empleos, a fin de mejorar la percepción empresarial y del consumidor, principales motores del crecimiento económico.
Los resultados más recientes del Indicador de Confianza Empresarial muestran que éste se mantiene por debajo del umbral de los 50 puntos, es decir, en la zona pesimista. En tanto, el Indicador Global de Opinión Empresarial de Confianza reportó una disminución mensual de 0.8 puntos durante octubre y una caída anual de 3.4 puntos, acumulando ya dieciocho meses consecutivos a la baja.
“En este contexto, es poco probable que el ritmo de avance de la economía mejore en lo que resta del año. Incluso, el pronóstico de crecimiento de los especialistas del sector privado se ajustó a la baja en octubre, para ubicarse en 0.5 por ciento”, señaló el Ceesp.
No obstante, el organismo consideró preocupante que la expectativa para el próximo año también se haya corregido a la baja, situándose en 1.3 por ciento, un punto menos que el pronóstico oficial de 2.3 por ciento.
De acuerdo con datos recientes del Inegi, la inversión fija bruta mantiene la tendencia descendente iniciada a principios de 2024. En agosto, registró una disminución mensual de 2.7 por ciento, lo que derivó en una caída anual de 8.9 por ciento, acumulando doce meses consecutivos a la baja.
Al analizar las cifras originales —sin ajuste estacional—, el debilitamiento más pronunciado se observa en la inversión pública, que en agosto reportó una contracción anual de 21.2 por ciento, con dieciséis meses consecutivos a la baja, de los cuales en doce las caídas han sido de dos dígitos.
Este comportamiento, explicó el Ceesp, refleja principalmente la comparación con los elevados niveles de inversión registrados en los periodos previos, destinados a concluir los grandes proyectos prioritarios del gobierno anterior. No obstante, desde entonces, la asignación de recursos públicos a inversión física ha sido limitada, debido al aumento de las necesidades de gasto en otros rubros, especialmente en los programas sociales prioritarios, entre los que destaca la pensión para adultos mayores.