El socialdemócrata Aecio Neves llamó hoy al Partido Socialista de Marina Silva, derrotada en las elecciones, a "unir fuerzas" contra la presidenta Dilma Rousseff en el balotaje del 26 de octubre.
"Es hora de unir nuestras fuerzas. Mi candidatura no es más la candidatura de un partido político, o de un conjunto de alianzas. Es un sentimiento más puro, de todos los brasileños que aún tienen la capacidad de indignarse", afirmó el candidato del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) en un discurso a sus simpatizantes.
Con 33.78% de los votos, Neves enfrentará en el balotaje a Rousseff (Partido de los Trabajadores, izquierda), que lideró el primer turno con 41.39%, tras casi finalizar el escrutinio. "Todos aquéllos que quieran contribuir a este proyecto son bienvenidos", había dicho antes a la cadena de televisión Globo.
Marina Silva, que llegó tercera con 21.29% de los votos representando al PSB, entró en la contienda en medio de la campaña en lugar de Eduardo Campos, de quien era candidata a vice y que falleció en un accidente aéreo.
En su discurso, Neves rindió un homenaje al ex gobernador de Pernambuco (noreste): "A sus ideales y sus sueños, mi reverencia, sabremos juntos transformarlos en realidad". El Partido Socialista no decidió aún si apoyará a Neves.
Por su parte, Rousseff animó a sus seguidores a apoyarla en la nueva votación del 26 de octubre y afirmó que, ahora, "la lucha continúa". Rousseff, que asocia a Neves al "pasado" que el país vivió en el Gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), dio el tono de lo que será su campaña para la segunda vuelta al afirmar que "será la lucha de los constructores de futuro, que jamás dejarán que Brasil vuelva atrás".
La presidenta agradeció "al pueblo" que le dio su "confianza" y le transmitió "un mensaje, un recado simple, que dice que debemos seguir en esta lucha junto a cada uno de esos electores para cambiar a Brasil", según afirmó.
Expresó también una gratitud particular a su antecesor y mentor político, Luiz Inácio Lula da Silva. "Sin el presidente Lula no habría llegado a donde llegué ni habría realizado el sueño de hacer un Brasil mejor", aseguró.
Pero también agradeció al Partido de los Trabajadores (PT) y a las formaciones de su coalición, así como a "otros partidos que no están ahora entre los aliados", pero que estuvieron en el pasado con su formación.
Esa última frase pudiera haber sido un mensaje cifrado dirigido al Partido Socialista Brasileño (PSB), que rompió con el Gobierno el año pasado para postular a la presidencia a Eduardo Campos, quien murió en un accidente aéreo el pasado 13 de agosto y fue reemplazado por Marina Silva, quien quedó tercera en las elecciones de hoy.
Rousseff, que en su juventud estuvo vinculada a grupos que se alzaron en armas contra la dictadura que imperó en Brasil entre 1964 y 1985, declaró ante sus seguidores que, "como en la resistencia, ahora la lucha continúa". Y aseguró que será "una lucha victoriosa, porque es la lucha del pueblo brasileño y el pueblo unido jamás será vencido".