El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, demandó el lunes a la cadena CNN, acusándola de difamarlo por temor a que el republicano se presente de nuevo a la presidencia en 2024, y exige 475 millones de dólares en daños y perjuicios.
CNN, una de las principales cadenas de televisión en Estados Unidos "trató de utilizar su enorme influencia —como fuente 'confiable' de información— para difamar al denunciante ante sus televidentes y lectores con el propósito de derrotarlo políticamente", según la denuncia de 29 páginas presentada en Florida.
"Como parte de su esfuerzo concertado para inclinar la balanza política a la izquierda, CNN trató de ensuciar al denunciante con una serie de etiquetas cada vez más escandalosas, falsas y difamatorias de 'racismo', 'lacayo de Rusia', ' insurrecto' y finalmente 'Hitler'", señala la denuncia. Trump reclama 475 millones de dólares en daños y perjuicios.
Durante todo su mandato, el ex presidente republicano tuvo una pésima relación con grandes medios estadunidenses como CNN y The New York Times, a los que bautizó como creadores de "fake news". Trump los atacaba generalmente a través de Twitter, red de la que posteriormente fue vetado.
La demanda insiste que CNN ha tratado de manchar a Trump usando lenguaje difamatorio como parte de un “esfuerzo concertado para inclinar el equilibrio político hacia la izquierda”. Redactada por los abogados del expresidente Lindsey Halligan y James M. Trusty la queja alega que la cadena ha etiquetado a Trump con una serie adjetivos "cada vez más escandalosos, falsos y difamatorios como 'racista', 'lacayo ruso', 'insurreccional' y, en última instancia, 'Hitler'".
CNN tiene barras matutinas, vespertinas y nocturnas de noticias en las que sus conductores suelen criticar al presidente aunque siempre buscan apoyarse con argumentos de expertos en asuntos legales, electorales y políticos. También suelen entrevistar a autores de libros que en los dos años recientes se han acumulado enjuiciando el accionar de Trump durante sus cuatro años de mandato en la Casa Blanca.
La Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos protege de manera profunda la libertad de expresión y este tipo de demandas suelen ser muy difíciles de probar. Apenas en febrero la ex gobernadora republicana de Alaska y candidata a la vicepresidencia Sarah Palin perdió una querella por difamación contra el diario The New York Times.
La Corte Suprema se negó a revisar el estándar de difamación que se estableció justamente en el caso New York Times v. Sullivan hace ya varias décadas.
dr