¿Trump faltó al respeto al rey Carlos III? Esto sabemos del protocolo

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene un historial de comportamiento 'fuera del protocolo' con mandatarios alrededor del mundo; así que muchos vieron su visita con la familia real con especial atención. 

El mandatario se paseó junto al rey Carlos III en carruajes, frente a las tropas y finalmente compartieron un banquete digno de monarcas; en compañía de la reina Camila y la primera dama Melania Trump.

Sin embargo, hubo acusaciones de que el jefe de la Casa Blanca no respetó las reglas escritas para convivir con la realeza, por el modo en que los saludó, sumado a un supuesto "protagonismo" durante el pase de revista. 

¿Realmente Donald Trump rompió el protocolo en Reino Unido?

Primero lo primero: la relación entre el magnate neoyorquino y los habitantes del Palacio de Buckingham fue muy tersa, pues ambos intercambiaron elogios y regalos simbólicos. 

Trump entregó a Carlos III una réplica de la espada que el presidente Dwight Eisenhower usó durante la II Guerra Mundial. Mientras que los reyes le obsequiaron un volumen de cuero conmemorativo del 250 aniversario de la Declaración de Independencia de Estados Unidos y la bandera británica que ondeó en el Palacio de Buckingham el día de su investidura.

"Mañana va a ser un muy gran día", decía Trump la noche del martes al llegar a Londres. Y por sus gestos, su sonrisa y la complicidad con el monarca británico (con muchas conversaciones distendidas y acercamientos incluso físicos) parece que para el estadunidense lo ha sido.

Pero el momento criticado fue durante el pase de revista a las tropas británicas: Donald Trump salió al jardín junto a Carlos III, pero en lugar de caminar a su lado se adelantó, acompañado por un guardia real.

Trump se adelanta:

Las críticas no tardaron en llegar. Algunos decían que "ignoraba al rey", otros que "desconocía las reglas". Sin embargo, realmente no hubo falta de respeto.

El protocolo real dicta que el rey camine detrás del jefe de Estado invitado, como una cortesía, y esto se ha visto durante las visitas de Emmanuel Macron o el propio George W. Bush, así lo confirmó una fuente de la familia, citada por Newsweek. 

De hecho, en la transmisión del evento se puede ver al rey Carlos III indicando a Trump que se adelante para el recorrido, con un gesto de la mano derecha. 

Aquí el ademán:

Pero esa no fue el único señalamiento, cuando Donald Trump llegó al Castillo de Windsor a bordo del helicóptero Marine One fue recibido por el príncipe William, y el estadunidense le dio un apretón de manos acompañado por una palmada en el brazo.

Ese último gesto de confianza fue señalado como una falta de respeto a la realeza, pues algunos medios exigían una reverencia o algún gesto más "solemne". 

Pero, el mismo príncipe William le regresó el mismo saludo sin mostrarse molesto. Esto ocurre con frecuencia durante sus apariciones públicas, pues mantiene una actitud más relajada y juvenil con sus amistades.

Así fue el saludo:

¿Cómo fue la cena de Trump con la realeza?

En el banquete de Estado se sirvió un Oporto Vintage Warre's 1945 en honor a Trump como 45º y 47º presidente y un coñac Hennessy 1912 -año de nacimiento de su madre escocesa, Mary Anne MacLeod-, según informó Buckingham.

Al banquete en el St. George's Hall del castillo acudieron 160 personas en una mesa tan larga como una piscina olímpica, donde estaban sentados el primer ministro Keir Starmer, otros destacados miembros de la política y monarquía y empresarios, entre los que estaban el gerente general de Apple, Tim Cook; el director ejecutivo de Nvidia, Jensen Huang, y el de OpenAI, Sam Altman.

Ambos jefes de Estado, situados en el centro de la mesa, se prodigaron en elogios durante la apertura del banquete. Trump destacó que Carlos III "ha entregado su terrible corazón" a Reino Unido, mientras que el monarca elogió "el compromiso personal del presidente para encontrar soluciones a algunos de los conflictos más insolubles del mundo", sin mencionar ninguno en concreto.

"Mientras la tiranía amenaza una vez más a Europa, nosotros y nuestros aliados nos unimos en apoyo a Ucrania para disuadir la agresión y asegurar la paz", declaró Carlos III durante su discurso, y Trump apuntó que "el vínculo de parentesco e identidad entre Estados Unidos y el Reino Unido es invaluable y eterno, es irremplazable e inquebrantable".

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